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GUILLERMO RENDUELES OLMEDO | Psiquiatra y autor del libro "Suicidio (s)"

"El suicidio es un manual de ignorancia; en psiquiatría hay poco saber real del tema"

"La eutanasia me parece peligrosa porque tendemos a calcular mal - el placer frente al dolor y, en ocasiones, la muerte seduce demasiado"

Guillermo Rendueles, ayer, durante la presentación de su libro en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón. JUAN PLAZA

El psiquiatra y ensayista Guillermo Rendueles Olmedo (Gijón, 1948), autor de numerosas obras a lo largo de su actividad profesional, presentó ayer su último libro, "Suicidio (s)", en el Club de LA NUEVA ESPAÑA de Gijón, una obra centrada en aquellas personas que deciden terminar voluntariamente con su vida y explora la idea de que todos los suicidios son diferentes.

- Habla de que todos los suicidios son diferentes. ¿Qué quiere decir?

-Uno de los errores del lenguaje es que hace iguales cosas que son muy diferentes. En la introducción de mi libro doy cuatro casos reales de suicidio. Uno de un joven que, ante su primer desengaño, se pega un tiro; otro de una mujer que acaba con su vida por que su suegra la trata mal; un canceroso que toma pastillas y un cuarto sin causas determinadas. Todos son suicidios, pero las causas no son las mismas. A veces, lo médico se confunde con lo legal. El suicidio elige el plural. Hay suicidios.

- Estadísticamente, ¿cómo es la tasa de suicidios en España?

-Las estadísticas son confusas. Las causas de la muerte por la vía legal no coinciden con las médicas. Hay ocultaciones de familiares y de los médicos porque en el suicidio hay un carácter peyorativo. A las estadísticas hay que hacerles caso, pero hay que tomarlas con precaución.

- Asturias es las regiones con tasas más altas. ¿Por qué?

-Cada año varían. En los recuentos nacionales las cifras son altas. Hay muchos factores, pero siendo las estadísticas en sí mismas confusas, no habría que hacerle demasiado caso al dato. Probablemente, la estructura de la pirámide poblacional, con mucha más gente anciana que joven, tenga mucho que ver.

- Se suele decir que el que avisa del suicidio, tiende a no hacerlo. ¿Es un mito?

-El suicidio está lleno de ideas falsas y sobrevaloradas. Se trata de dar una apariencia de saber con un tema confuso. Hay quien lo dice y lo hace, y otros que lo ocultan con un accidente. El saber popular y el saber científico se mezclan, por lo que no hay saber.

- ¿Se puede estudiar qué es lo que lleva a una persona a terminar con su vida?

-Hay muchas causas y hay que contextualizarlas porque sino las motivaciones son confusas. Los datos más interesantes son las notas que dejan los suicidas. Ahí se puede comprobar lo diversas que son las causas. Hay casos que no tienen explicación.

- La depresión explicará muchos de los casos de gente que se suicida.

-Hay especulaciones de todo tipo, como el odio contra uno mismo de Sigmund Freud. Que la depresión influye es una evidencia. Si te vas a matar o estás pensando en ello, lo normal es que no te pongas a bailar una jota. Pero el suicidio no siempre es el resultado de una depresión.

- Se centra en cómo las familias viven el suceso. ¿La culpabilidad es uno de los sentimientos más comunes en estos casos?

-Es uno de los sentimientos, pero no tiene por qué ser así. Hay casos en los que los familiares experimentan alivio porque su ser querido ha dejado de sufrir. Describo en mi libro seis actitudes diferentes, pero seguramente haya muchas más. El suicidio es un gran manual de ignorancia porque en psiquiatría hay poco saber real en este tema.

- Últimamente han saltado casos de niños que se suicidan tras sufrir acoso escolar. ¿Son estos los casos más atroces?

-No he tenido casos similares, pero los he podido leer. Los suicidios en niños son todos atroces, inesperados e inexplicables.

- ¿Qué opinión le merece la eutanasia o el suicidio asistido?

-Lo veo peligroso porque tendemos a calcular mal los placeres frente a los dolores. A veces, la muerte seduce demasiado.

- ¿Existe el efecto contagio con el suicidio?

-Es discutible. Hay tesis que dicen que sí, pero hay otros estudios que afirman que lo que se produce es una actualización de algo que ya se tenía en mente y que esa actualización es momentánea. Por ejemplo, en fiestas, cuando alguien se supone que tiene que estar muy feliz también se actualiza algo que ya se tenía en mente.

- ¿El suicidio es un tabú?

-También es discutible. Hay una romantización del suicidio. A las personas que deciden terminan voluntariamente con su vida se las considera héroes, pero no se le considera de tal forma a la persona que decide aguantar con un ELA hasta el último momento. Si el héroe y el progresista es la persona que opta por la eutanasia, favoreces el proceso.

- ¿El silencio en los medios en un caso de suicidio invisibiliza el problema?

-Depende de la forma de contarlo. Si se cuenta de una forma romántica, como algo heroico puede servir para reclutar suicidas. Invisibilizarlo no vale de nada, porque todo el mundo sabe que hay muchos suicidios, pero si se cuenta de forma real... Sería bueno desmitificar falsos accidentes y conductas de alto riesgo.

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