Poco a poco, y apoyándose en la tecnología, los diversos ámbitos de gestión municipal intentan recuperar el ritmo de trabajo previo al estado de alarma que trajo la crisis del coronavirus. Los integrantes del consejo de administración del Centro de Transportes han sido llamados por su presidente, Aurelio Martín, a votar de cara a este lunes, por escrito y sin sesión, la formulación de cuentas de 2019. Una decisión pendiente desde que se anulara el consejo de administración previsto para mediados de marzo. La presentación de cuentas tiene como complemento la memoria de gestión de un equipamiento que se busca revitalizar tras años de abandono, caída de usuarios y problemas económicos y que se quiere reivindicar como una plataforma económica importante para Gijón. El interés en conseguir ese reto ha llevado a nombrar gerente a Luis Miguel Fernández Romero, tras llevar años vacante ese puesto.

La decisión fundamental que se pide a los consejeros es que den el visto bueno a que el beneficio del ejercicio, que asciende a 20.569,56 euros, se dedique a compensar pérdidas de ejercicios anteriores. En 2018 hubo un resultado negativo de 33.285 euros. Esta empresa mixta que tiene como socios al Ayuntamiento de Gijón y el Principado de Asturias tiene un presupuesto de unos 750.000 euros.

El Centro de Transportes es un complejo que suma a dos espacios de estacionamiento de camiones y autobuses una oferta de naves y oficinas para empresas, fundamentalmente del sector de la logística. Mientras la ocupación de la zona parking está en sus niveles más bajos con un cierre a 31 de diciembre de 2019 al 51,7% con 194 abonados se ve un repunte en el interés por las oficinas y las naves. El grado de ocupación de las oficinas fue del 53,3% muy similar al de 2018 y por encima de los cuatro ejercicios anteriores. Las naves tenían entonces un grado de ocupación del 83% que se ha elevado al 100% en los primeros meses de este año en curso.

El número de vehículos pesados que entraron en esos dos aparcamientos en 2019 alcanzó los 39.226, cuando la media de los años anteriores era de 41.700. Se contabilizaron 2.127 camiones en tránsito con 71.029 horas de ocupación. Otra vez la cifra más baja de los últimos ejercicios. Una de las razones de ese bajón en la parte de aparcamiento tiene que ver con la puesta en marcha de un dispositivo similar en El Musel.También descienden las operaciones del servicio de báscula: 1.225, un 15% menos que en el ejercicio anterior

Una buena opción para los camioneros

La extraordinaria situación que vive todo el país por la crisis del coronavirus ha dado a los transportistas un papel esencial para garantizar los suministros a empresas y familias confinadas en sus hogares. Eso ha colocado al Centro de Transportes como elemento de máxima necesidad y por eso se mantiene abierto las 24 horas del día y con todos sus servicios operativos. Los trabajadores de administración han pasado a prestar sus servicios mediante teletrabajo, mientras que porterías, mantenimiento y gerencia trabajan de manera presencial, con todos los protocolos de higiene y seguridad activados.

La instalación de Tremañes es una buen opción para los camioneros que necesiten una zona para descansar y asearse. Algo que ya no se encuentra en los negocios de carretera cerrados a cal y canto. El Centro tiene servicios de aseo y duchas, cuya limpieza ha sido reforzada, y permite también que, dentro de su recinto, se reciban entregas personalizadas de los establecimientos de comida preparada a domicilio que están operando.