Un hombre de 40 años fue detenido anteayer después de haberse encerrado con otro varón en un cajero y escupir después a los agentes que trataban de identificarle. La pareja se había "atrincherado" en la entidad bancaria a primera hora de la mañana, prohibiendo la entrada de varios clientes que hacían fila en la puerta. El otro implicado siguió las instrucciones a la primera, pero el primero acabó reducido a la fuerza por su actitud violenta.

La intervención se produjo a las 7.15 horas, en la calle Cataluña, por parte de varios agentes del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de Gijón, que comprobaron que las dos personas estaban consumiendo alcohol en el interior del cajero y sin respetar la distancia de seguridad entre uno y otro. Los dos fueron propuestos a sanción por incumplir el estado de alarma, y el detenido, acusado ahora de atentado, tenía vigente una reclamación de un juzgado gijonés por un delito de lesiones del pasado mes de noviembre.