A lo largo de los primeros cuatro meses de este año la Fundación Municipal de Servicios Sociales ha concedido 930 ayudas de emergencia en sus modalidades de ayudas de primera necesidad, ayudas para el pago de gastos ordinarios o extraordinarios y ayudas a familias. Son 50 más de las que concedió en todo 2019. El año pasado la estadística se cerró con 880 ayudas: 736 a familias, 143 de emergencia y 1 a la infancia
La espectacular subida de este 2020 tiene mucho que ver, más bien todo, con las consecuencias sociales y económicas de las medidas tomadas para evitar la propagación del coronavirus. El impacto social, se asegura desde la Fundación , ha sido "elevadísimo" y afecta a esa parte de población que ya se consideraba vulnerable antes de empezar la crisis pero también a muchas familias que están en una situación de urgencia social sobrevenida al perder el empleo, y por tanto, el pilar de su sustento.
Dos datos bastan para evidenciar por donde viene el repunte de las necesidades de los gijoneses. Uno, los servicios sociales gijoneses tramitan estos días una media diaria de 40 solicitudes de ayuda. Dos, desde el 22 de abril cuando la Fundación modificó la normativa de sus ayudas de emergencia para flexibilizar los requisitos a exigir hasta ayer se sumaron 357 nuevas ayudas concedidas. En todo el mes de enero fueron 57.
Esta cifra de 930 ayudas concedidas la compartió ayer la edil socialista Natalia González, concejala de Bienestar Social y Derechos y presidenta de la Fundación Municipal de Servicios Sociales, con los integrantes de la comisión municipal especial para la gestión de la crisis surgida de la Junta de Portavoces. Es una cifra que no va a parar de subir.
Por ello, la Fundación ya tiene en marcha una primera modificación a su presupuesto de partida de este año que era de casi 22 millones. En concreto, 21.921.700 euros. El primer ajuste, a asumir con sus propios remanentes, se espera tramitar este mismo mes y alcanza los 2,5 millones de euros. Se distribuye en tres bloques. El más cuantioso es de 1,5 millones y va directo al fondo de ayudas económicas para garantizar la cobertura de las líneas de ayudas de emergencia y ayudas de integración dando por hecho que las necesidades de las familias por el impacto de la crisis del covid-19 continuarán en los próximos meses. Ahora mismo la dotación presupuestaria de este programa es de 1.150.000 euros.
En 350.000 euros se estima la necesidad de ampliar los 875.000 euros del plan de choque con la intención de dotar de más recursos las ayudas a gastos de energía al entender que más familias de las estimadas en su momento cumplirán ahora con los requisitos para optar a esa ayuda. La idea de la Fundación de Servicios Sociales es abrir la convocatoria de las ayudas energéticas en cuanto se levante el estado de alarma.
La modificación prevista incluye también 650.000 euros para lo que, en el presupuesto, se titula como ayudas complementarias, y que tiene una dotación inicial de algo más de un millón de euros. Aquí en lo que piensa la Fundación es en tener dotación económica para cubrir las necesidades de alimentación de muchos niños y niñas en el verano si, por razones de confinamiento y seguridad, no se puede poner en marcha el programa 11x12, y más en concreto, su servicio de comedor.
Si todo sale según lo previsto, esta modificación pasaría su primer trámite en la comisión de Hacienda del día 21 para poder ser presentada, y votada, en el Pleno anunciado para el día 27. Una sesión donde se empezarán a ver los ajustes económicos a través de los que se reformulará el presupuesto del año -el primero aprobado desde 2017- para acometer las nuevas necesidades que va dejando el covid-19 a su paso.
