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Las despedidas de soltero agonizan por el retraso de bodas: "Es la ruina para el sector"

"Hacen falta medidas", urgen los organizadores de eventos, casi en el dique seco porque la mayoría de enlaces matrimoniales se han pospuesto

Jóvenes celebrando una despedida de soltera en Gijón. JULIÁN RUS

Las empresas gijonesas que organizan despedidas de soltero están al borde del precipicio. El coronavirus ha pospuesto la mayoría de los enlaces hasta después del verano e, incluso, hasta el año que viene. Pocos serán los que se den el "sí quiero" en Gijón estos meses, así que el sector, que mueve habitualmente alrededor de 300.000 euros cada fin semana, ha dado la voz de alarma. "Damos el año por perdido", lamentan los principales empresarios que organizan despedidas de soltero en la ciudad.

Ricardo Blanco es el propietario de la firma "Despedidas Top Gijón". Al cabo del año puede organizar cerca de 300 fiestas, entre diez y 12 cada fin de semana. En 2020 solo ha sacado adelante tres. Todo lo demás se canceló. El abismal desplome se explica porque la declaración del estado de alarma coincidió con el arranque de la temporada alta de este negocio, que es entre marzo y septiembre. "Todo lo que hace falta para hacer una despedida está cerrado. No hay pubs, ni discotecas, ni hoteles. El sector está muy perjudicado", afirma. "El año lo damos por pedido. El sector del ocio se va a complicar mucho", teme Blanco.

Laura Ferreiro habla por la firma "Gijón de Farra". Tiene el récord, dice, de haber organizado en un solo fin de semana cenas para 500 comensales. "De 300 personas en un fin de semana no bajábamos", puntualiza. Reclama ayudas para sacar de la UCI a su sector. "El Gobierno tiene que hacer algo, porque es la ruina. A muchas empresas se le pide la devolución completa, pero es un dinero que tiene comprometido", subraya la empresaria.

Félix Martínez regenta "Gijón despedidas". Matiza que no solo el presente pinta negro para su sector, sino también el futuro, por un temor a un nuevo rebrote de coronavirus en septiembre. Mueve alrededor de 200 personas cada fin de semana en diferentes eventos como paintballs, paseos en buggies o fiestas. "Tendremos que intentar aguantar como sea, pero desde luego que 2020 ya es un año perdido para nosotros", anuncia. "A muchos nos va a tocar pedir préstamos, así que cuando vuelva la normalidad no empezaremos de cero", añade.

El Ministerio de Sanidad confirmó ayer que Asturias entrará el lunes en la Fase 2 de la desescalada. Ello significa que los enlaces matrimoniales con público vuelven a estar permitidos, si bien, con severas restricciones de aforo. A saber, solo 100 personas si el enlace es el exterior y 50 si se celebran en interiores.

Unas condiciones poco atractivas para los contrayentes, que ante la situación de incertidumbre, decidieron dar marcha atrás a sus enlaces. Los párrocos de las iglesias donde más matrimonios se celebran, es decir, los de San Pedro, Cenero y Deva, reconocen que muchas de las bodas que tenían previstas para este año se han pospuesto bien a septiembre bien al año que viene. De hecho, los cursillos matrimoniales necesarios para oficiar el sacramento estaban suspendidos y se recuperarán en dos tantas, entre finales de este meses y finales del próximo.

Las bodas civiles se recuperarán a partir de lunes. El Ayuntamiento tiene seis peticiones para el último fin de semana de mayo y otras 26 más para el mes de junio, aunque, fuentes municipales reconocen que ese número podría disminuir si los contrayentes no tienen los documentos pertinentes.

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