Manuel Cañete es el presidente de la Federación de Asociaciones Vecinales de la zona urbana (FAV), que en el intenso debate político y social sobre la ubicación de la estación intermodal apuesta por "lograr un consenso" como el que del convenio suscrito en el seno de Gijón al Norte en 2019 por el que se acordó soterrar junto al Museo del Ferrocarril la infraestructura. Una postura respaldada hace dos días por 20 de los 27 colectivos que forman la organización.
- La declaración ambiental para la ubicación de la estación intermodal en Moreda sigue vigente. ¿Suficiente para avalar el cambio de ubicación?
-Nadie se lanza sin paracaídas así que era lo esperado. El problema es tener una seguridad jurídica que permita hacer un cambio sin dar más vueltas. Demasiadas veces hemos tirado hacia adelante con obras que luego se paralizan.
- ¿No lo considera definitivo?
No. Es una aportación que ya seguro que la tenían. El espaldarazo definitivo es la seguridad jurídica. Así se zanjaría el debate. Si quieren hacer la intermodal en otro lugar, les faltarían proyecto, plazos e inversión.
- Los sindicatos, la Unión de Comerciantes y la Cámara de Comercio apoyaron ayer en el Consejo Social la construcción de la estación en Moreda.
-La misma alegría había cuando se firmó el convenio de 2019. El Museo del Ferrocarril tampoco era la apuesta de los vecinos, pero, y hasta la Alcaldesa lo dijo, se trataba de no romper un consenso. Han cambiado las condiciones económicas. Es una situación parecida a 2008.
- Incluso hasta peor.
-Sí, probablemente. El Consejo Económico y Social lo que quiere es lo mismo que quiere la sociedad. Una solución definitiva. Ahí todos estamos de acuerdo. He hablado con todos los miembros del consejo. Piensan lo mismo que la Federación Urbana. Quieren garantías de que este proyecto, el que sea, salga. No solo valen las palabras porque seis ministros han dicho lo mismo en 20 años y no hemos visto una pala poniendo una vía. Al contrario, se han quitado estaciones.
- ¿Por qué no estuvo la FAV en el Consejo Social? Convocaron una reunión propia a la misma hora y el mismo día.
-Tuvimos una reunión con la Alcaldesa para hablar del plan de vías el 20 de mayo. Estuvo también la Federación Rural. Ahí ya debatimos sobre el plan de vías. Poco después se convocan los consejos de distrito. Teníamos una reunión de la junta de la FAV el 1 de junio que es cuando siempre se producen. No podíamos aplazarla más tiempo, porque teníamos que hablar de cómo reiniciar la actividad. Por videoconferencia no era posible, porque hay gente mayor. No solo se habló del plan de vías sino de otros temas, como lo que está pasando con los centros de salud.
- Sí, pero la reunión fue hace dos días. No el 1 de junio.
-Sí, pero estaba el consejo de distrito de la zona sur, donde estoy citado. Cuando supe que el Consejo Social era el miércoles, ya teníamos fijada la fecha de la junta.
- O sea, coincidieron las fechas, no fue un portazo.
-No, no fue un portazo. Ya estuvimos con la Alcaldesa y en cinco distritos.
- La FAV cerró filas el miércoles en torno al Museo del Ferrocarril. Sin embargo, a título individual, algunas asociaciones había dicho que prefieren Moreda. ¿Cómo puede haber entonces solo una postura?
-Es que no nos mantenemos firmes en el convenio. Lo que decimos es que hay un convenio que dice que anula el anterior, el de 2002. Lo dice Fomento, no yo. Ese es el acuerdo de tres administraciones, de todos los representantes políticos por primera vez en la historia y de todo el entramado social. Los que dicen en sus consejos de distrito que ven bien Moreda son los mismos que decían antes que veían bien el Museo del Ferrocarril. Los mismos. Hay un convenio, pues cúmplase.
- ¿Entonces?
-Que busquen un consenso. Sin la mayoría del Ayuntamiento esto no sale para adelante por mucho que la Alcaldesa diga que Moreda le gusta más. Necesita una mayoría política. Nosotros no votamos. Ayer la FAV puso sobre la mesa el BOE donde sale el convenio. Para cambiar eso hacen falta mayorías. Nos movimos solo cuando esto no pitaba. Nadie ha apreciado el esfuerzo de los vecinos para lograr un acuerdo.
- ¿Siente frustración?
-La palabra es hartazgo. Entiendo a la gente que se encerró por el plan de vías. Fue una decisión que salió de nosotros. Es más, sale de mí. Y se puede comprobar. ¿Cómo le dices a la gente que pasa necesidades que tras dos décadas seguimos jugando a Divertren? Romper el convenio para volver otra vez al principio es una afrenta a Gijón y a toda Asturias.
- A pesar de que los informes técnicos dicen que Moreda es más barato y rápido que el Museo.
-Entiendo las razones. Si fuera la primera vez que se cambia, sería una decisión valiente. Pero es la cuarta. Para romper un convenio, para romper un acuerdo, tienes que tener muy buenas razones. Lo que se dice es que la diferencia entre uno y otro proyecto debe de ser del 20 por ciento. La diferencia es del 8. Es mucho dinero y no estamos para tirarlo. Un euro mal gastado es una injusticia. Pero no estamos hablando de lo mismo.
- ¿Desconfía?
-Hay un resquemor y la percepción de que se haga lo que se haga, nuestros representantes no están a la altura.
- ¿Se manifestarán?
-A corto plazo, no. Estamos a la espera de que la Alcaldesa busque los acuerdos necesarios, que haya proyecto, plazo e inversión. Estaremos atentos. En un futuro, no lo descartamos si se producen las mismas condiciones porque esto es reiterativo.
