El "preso resucitado", el ovetense de 32 años Gonzalo Montoya, continúa con su carrera delictiva por toda la región con un nuevo arresto, esta vez en Gijón, donde perpetró el robo de hasta 25 baterías de unas carretillas elevadoras que se encontraban en un almacén del polígono de Porceyo. Lo hizo en compañía de otro individuo, también detenido. El pasado mes de abril, Gonzalo Montoya fue también detenido en el polígono Espíritu Santo de Oviedo por robar varias llantas y herramientas.

El nuevo conflicto de Gonzalo Montoya -que en 2018 se le dio por muerto en la Cárcel de Asturias y "revivió" en el Instituto de Medicina Legal de Oviedo- ocurrió el 24 de mayo, cuando el encargado de una empresa distribuidora de vino denunció la sustracción de 25 baterías que alimentaban las carretillas elevadoras del almacén, lo que las dejó inutilizadas para poder transportar la mercancía. Los responsables actuaron de noche.

Las únicas pistas con las que contaba los investigadores eran las cámaras de seguridad, donde se veía claramente cómo los autores huían a bordo de una furgoneta con el material sustraído. Los trabajos permitieron identificar a los responsables: una vez más se trataba de Gonzalo Montoya. El otro detenido es un mierense de 43 años con muchos delitos a sus espaldas. La investigación sigue en marcha para intentar recuperar las baterías, que se sospecha fueron vendidas en una chatarrería de la región.