Comienzan los problemas en la zona rural por la falta de desbroce. La negativa del Ayuntamiento a hacerse cargo del acondicionamiento de fincas privadas, una medida lanzada este año que acabó con una costumbre asentada en las parroquias, habituadas a delegar durante años estas tareas a empleados municipales, tiene ahora preocupados a los vecinos de Ruedes. Consideran que el mal estado de sus carreteras amenaza ahora con causar accidentes. "Ya no pasan bien dos coches y los ciclistas tienen que tirarse a la cuneta si viene alguien. Así no se puede seguir", lamentan.

El Consistorio dio a conocer su decisión de desentenderse de estas tareas -en realidad, no son de su competencia- el pasado mes de febrero, y ya por entonces buena parte de la zona rural, representados por la asociación vecinal "Les Caseríes", habían alertado precisamente de que el perfil demográfico de la zona, muy envejecido, complicaría el cumplimiento de la orden. En Ruedes están especialmente preocupados por la carretera del Alto de la Madera, empleada a diario por residentes que trabajan en la ciudad y por ciclistas y senderistas.

"A estas alturas del año lo normal es que la hubiesen limpiado tres o cuatro veces, porque hay trozos que o no sabes de quién es la finca o es zona pública. Creemos que están esperando para ver quién cumple y quién no para multar, pero aquí hay ancianos que no pueden ni pagar a alguien que les desbroce ni una multa", concretan los afectados. Ahora que llega el calor, la maleza de las cunetas comienza a secarse y los vecinos temen dos cosas: que algún senderista tire una colilla mal tirada y provoque un incendio y que los nidos de avispa asiática que vuelven a aflorar en la zona decidan ocultarse en estas fincas. "Lo lógico sería que pasasen una máquina; así lo limpias todo de golpe y si rompes algún nido nadie corre peligro. Al final lo que se quieren ahorrar desbrozando se lo van a gastar apagando incendios. Es un peligro", advierten en Ruedes.