La Fiscalía de Área de Gijón solicita la condena de un joven procesado por agredir sexualmente a una excompañera de instituto, en Gijón. La vista oral, que la Fiscalía solicita que se celebre a puerta cerrada, está señalada hoy en la Sección Octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, a las 10.00 horas.Los hechos

El Ministerio Fiscal sostiene que, en la madrugada del 17 de febrero de 2019, entre las 5:00 y las 6:00 horas, el procesado, que en ese momento tenía 18 años, se encontraba en un pub de la calle Rodríguez San Pedro de Gijón, donde coincidió con una joven de la misma edad y a quien ya conocía de la época de Instituto. Poco después, ya en el exterior del local, ambos se dirigieron a la zona del espigón. Tras estar besándose un rato, el procesado empezó a desvestir a la chica, a lo que esta se negó, por lo que él paró. A continuación, se alejaron unos metros, hacia una zona más reservada, donde el procesado insistió en quitarle la ropa, rechazándolo ella. A pesar de ello, el procesado, agarrándola por los hombros, la bloqueó contra la barandilla y le bajó la ropa, con la oposición de la chica. En el forcejeo, ambos cayeron al suelo y el procesado, cogiéndole la cabeza por el pelo, intentó que la víctima le realizara una felación. También trató de mantener relaciones sexuales completas con ella. La joven logró finalmente apartarlo y le propinó una bofetada. Entonces, el procesado abandonó el lugar.

A consecuencia de estos hechos, la víctima sufrió hematomas y erosiones, de los que tardó en curar 14 días, sin precisar tratamiento médico. Sí necesitó atención psicológica.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de agresión sexual del artículo 179, en relación con el 178, del Código Penal y solicita que se condene al procesado a 8 años de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena, así como 5 años de libertad vigilada con las medidas de prohibición de aproximarse a la víctima en una distancia inferior a 200 metros; prohibición de comunicarse con la víctima por cualquier medio y obligación de participar en un programa de educación afectivo-sexual.

En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Fiscal solicita que el procesado indemnice a la joven con 560 euros por las lesiones y 4.000 euros más por los daños morales, más los intereses legales correspondientes.