La Junta de Gobierno dio ayer su aprobación a la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Ayuntamiento y sus tres organismos autónomos: las fundaciones de Educación y Cultura y Servicios Sociales y el Patronato Deportivo Municipal. El documento, que no cuenta con el apoyo de la representación sindical pese a los meses de negociación, incorpora una serie de modificaciones destinadas a adecuar la realidad de la estructura de trabajo al diseño político fijado por la socialista Ana González y su equipo al llegar al poder hace algo más de un año.

A este cambio de presente le seguirán varios de futuro en el ámbito de personal. Marina Pineda, concejala de Organización Municipal y portavoz del gobierno, adelantaba ayer la intención de comenzar en septiembre una revisión, "servicio a servicio", de todo el organigrama municipal. Al tiempo se están elaborando los informes que delimiten el proceso a seguir para disolver los organismos autónomos integrándolos en el Ayuntamiento.

"El modelo de estructura se ha ido deteriorando con los años. El Plan Reto (nombre de un proyecto de reforma de la organización municipal que impulsó Foro sin llegar a ejecutar) no nos gustó pero es cierto que había un diagnóstico acertado sobre la existencia de demasiados puestos diferenciados y singularizados. Hace mucho que no se hace una valoración de puestos de trabajo, que debemos acompasar con una revisión de los procedimientos de trabajo", explicó Pineda.

La RPT define las condiciones de 1.474 puestos de la estructura fija del Ayuntamiento y sus organismos. No son las únicas nóminas que se pagan desde las arcas municipales. Si se suman también personal de gabinete, directivos y, sobre todo, los trabajadores incluidos en el denominado catálogo de puestos no permanentes - el centenar de educadoras infantiles de las escuelas de bebés, por ejemplo- la cifra de plantilla se eleva a 1.873 personas. El cómputo se incrementa a 3.179 personas, según la última revisión, contando al personal de todas las empresas de titularidad municipal. Entre estas empresa está Divertia cuya disolución también está en marcha con la intención de que vuelvan al Ayuntamiento el Botánico, que iría a la concejalía de Medio Ambiente, y la acción turística, que iría a Promoción Económica. Otro cambio más en la RPT cuando se haga realidad a principios de enero.

Uno de los cambios más importantes del organigrama aprobado ayer tienen que ver con la reordenación de la Alcaldía incorporando la Dirección General de Innovación -integrada por los servicios de Estrategia de Ciudad Inteligente y Sostenible y Promoción e Internacionalización de Ciudad- y el nuevo servicio de Compra Pública, que sustituye al de Contratación y Compras que estaba en Patrimonio. "Es un servicio estratégico que era necesario reforzar porque era donde se producían más tapones y problemas ralentizando la actividad municipal", explicó Pineda tras la Junta. Mismo argumento, el de agilizar expedientes, que avala reforzar el área de Intervención General

La forma de gestión económica municipal también sufre un vuelco con la creación de ocho centros gestores dependientes de la Dirección General Económico-Financiera que se encargarán del diseño y seguimiento del presupuesto y el apoyo en la tramitación de expedientes de contratación. En personal, el cambio se centra en la división de la organización en dos servicios: uno para la gestión ordinaria y otro enfocado a la planificación de políticas de organización de recursos municipales.

Cuantitativamente, el edil con más personal a su cargo, más de medio millar de personas, es José Luis Fernández. Su poderío tiene que ver con la gran cantidad de personal de Seguridad Ciudadana. La otra "jefa" de personal potente es Marina Pineda con 274 personas adscritas a una concejalía que mueve Hacienda, Organización Municipal y Personal. Por encima del centenar está el personal de las áreas que dirigen Alberto Ferrao y Natalia González y que se corresponden, respectivamente, con las concejalías de Educación y Cultura y Servicios Sociales.