Los tráficos en el puerto de El Musel descendieron en un 15,85% en el primer semestre del año a consecuencia de los efectos económicos que ha tenido la crisis sanitaria del coronavirus. En el primer trimestre del año, antes de que se comenzaran a notar los efectos de la pandemia en las importaciones y exportaciones de mercancías, los tráficos del puerto gijonés habían experimentando una progresión positiva, aumentando en un 5,21% respecto al mismo periodo de 2019.

En cifras absolutas, el puerto gijonés cerró el primer semestre del año habiendo perdido más de 1,5 millones de toneladas, pasando de las 9.158.157 de 2019 a las 8.009.696 de este año, según las estadísticas oficiales de Puertos del Estado. Del acusado descenso en los seis primeros meses del año no se salva ningún grupo de mercancías. Así, se produjeron caídas tanto en graneles sólidos, como en graneles líquidos, en mercancía general y en carga contenerizada.

En volumen, la bajada más significativa ha sido la de graneles sólidos, con la pérdida de 1,26 millones de toneladas, pasando de 8,04 millones a 6,78 millones de un año para otro. Eso representa un descenso del 15,69%. En buena medida, la pérdida de graneles sólidos tiene que ver con la menor actividad de la terminal de minerales de El Musel, Ebhisa, ante la parada de uno de los dos hornos altos de ArcelorMittal en la factoría de Veriña.

La mayor caída en términos porcentuales se produjo en los graneles líquidos. En el periodo analizado se movieron por El Musel 291.171 toneladas de estos productos, un 38,91% menos que las 476.604 del primer semestre de 2019.

En mercancía general los efectos del coronavirus también se están haciendo notar en magnitudes de dos dígitos. Así, en la carga general, se ha pasado de 985.839 toneladas entre enero y junio del año pasado a las 886.173 de este, un 10,11% menos.

En tráfico de contenedores, la caída es del 7,66% en toneladas, pasando de 511.512 a 472.325, mientras que en TEUS (contenedores de seis metros o su equivalente) se ha pasado de 38.538 a 36.403 entre un semestre y otro, lo que supone un descenso del 5,54%. La caída de tráficos derivada de la pandemia está siendo más o menos acusada en todos los puertos de interés general del Estado, con la única excepción del de la Bahía de Cádiz.