La fábrica gijonesa de mobiliario urbano Proyectos e Instalaciones de Material Urbano (Primur) está a plena ocupación gracias al contrato para entregar 77 cabinas de cobro, peaje, así como aseos, para la terminal de ferry del puerto francés de Calais, por la que cada día pasa un ingente número de vehículos para embarcar rumbo al puerto de Dover (Reino Unido), en la ruta marítima más corta que atraviesa el Canal de la Mancha.
La compañía gijonesa comenzó a trabajar en este contrato a principios de año y ya ha concluido la construcción de las 30 primeras unidades, que ya están listas para su envío por carretera al puerto francés. La fábrica gijonesa, ubicada en la avenida de Los Campones, se encuentra cerrada estas semanas por vacaciones, pero ha enviado a Francia a un equipo de su plantilla que será el encargado de la instalación in situ de esta primera tanda de cabinas.
La actividad en la factoría de Tremañes, que cuenta con unos 80 trabajadores en plantilla, se ha mantenido pese a la pandemia del coronavirus gracias a este contrato con Francia, el principal que actualmente tiene en cartera.
No es la única obra que tiene contratada la empresa, pero otras sí se han retrasado debido al coronavirus. Se trata de sendos proyectos de la empresa para clientes españoles. En concreto, la empresa ha tenido que retrasar la fabricación de marquesinas encargadas por el Ayuntamiento de San Sebastián, trabajos que previsiblemente comenzarán en septiembre.
El otro trabajo que se ha tenido que aplazar debido a las circunstancias, son las cabinas encargadas por la ONCE, antigua propietaria de Primur a través de Ilunion (el grupo industrial de la Corporación ONCE).
En junio de 2017 Ilunion vendió Primur al grupo barcelonés Zedis, que ya por entonces era proveedor de kioscos de venta para el cupón de la ONCE, al igual que Primur. En aquella fecha la fábrica gijonesa contaba con 47 empleados, cifra que ha ido incrementado en estos años, en los que el grupo catalán ha apostado por potenciar la factoría gijonesa. Así, Primur cuenta con carga de trabajo suficiente para lo que resta de año y con proyectos que garantizan un buen nivel de actividad para 2021.
La internacionalización ha sido clave en el auge de Primur, que a principios de la década pasada tuvo que reducir plantilla, en un momento en el que el 90% de sus ventas estaban orientadas a España. Desde 2016 destina la mayor parte de su producción a mercados internacionales. De su factoría también ha salido mobiliario urbano para destinos más próximos. Es el caso de la caseta de salvamento de la Playa de San Lorenzo y, también en Gijón, del kiosco de Emtusa en La Acerona, que son los elementos más reconocibles del mobiliario urbano que ha producido para su propia ciudad.
