Natural Mining Resources 1926 (NMR), principal operador de carbones en el puerto de El Musel, cerró ayer la compra de la mina de antracita de Pilotuerto (Tineo), de la que prevé extraer 700.000 toneladas anuales de antracita para exportar por el puerto de El Musel a siderurgias y empresas metalúrgicas de Asia y de Latinoamérica.
La antracita que se extrajo durante 60 años de este yacimiento minero se destinaba a la térmica de carbón de Soto de la Barca, de Naturgy (Unión Fenosa), en el mismo concejo. Se trata de un uso excepcional de la antracita, que tiene más salida en el mercado siderúrgico y a empresas metalúrgicas, al que ahora se va a dirigir la producción del que según explica la compañía es uno de los yacimientos de antracita más grandes de Europa.
NMR va ahora a proceder a tramitar los permisos administrativos necesarios para poder comenzar la explotación subterránea del yacimiento. Una vez obtenidos y tras la adecuación de las instalaciones, comenzaría la explotación. En cuanto al empleo que se prevé generar, de manera inicial sería de 50 trabajadores, si bien la compañía apunta que la cifra podría variar en cuanto avancen los cortes de los frentes de explotación de la mina. Hasta ese momento no se podrá determinar el número total de trabajadores necesarios.
La explotación adquirida es la antigua González y Díez, que en su día fue propiedad del dueño de Mina La Camocha. La misma fue adquirida por NMR a las empresas Prosimet y Minerales del Bierzo, sus últimas propietarias. La firma resalta que la adquisición de la mina de Pilotuerto para su explotación "es un complemento de la estrategia de NMR y de su compromiso con Asturias".
La empresa se estableció a finales de 2018 en El Musel, dedicándose inicialmente a la importación, cribado y exportación de carbones para térmicas y empresas siderometalúrgicas de países del Mediterráneo. Ahora ya está atacando el mercado asiático, con envíos a Vietnam y a India.
Una de las claves para que eligiera el puerto gijonés para sus operaciones son las oportunidades de negocio con el carbón nacional. Tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA el pasado febrero, además del trasiego con carbón importado, la compañía preveía exportar por El Musel mineral extraído de cuatro yacimientos de Asturias y León.
La de Pilotuerto no es la primera mina que NMR ya tiene en cartera para explotar en Asturias. También está tramitando el inicio de la actividad en la mina de El Carballo, en Cangas del Narcea.
En cuanto a la antracita extraída del yacimiento tinetense, va a ser comercializada a través de la sociedad NMR Middle East DMCC -sociedad con sede en Emiratos Árabes-, que es la encargada de abrir mercados para este producto, fundamentalmente en países de Oriente Medio, del Lejano Oriente y de Sudamérica, si bien la antracita asturiana puede también venderse a siderurgias y empresas metalúrgicas de otras partes del mundo.
NMR ya ha enviado desde el puerto de El Musel varios cargamentos de antracita a la India, para abastecer a compañías siderúrgicas. Entre este país y Vietnam, la empresa espera exportar en los próximos doce meses por El Musel alrededor de 1,5 millones de toneladas, en las que se incluyen tanto antracita de uso siderometalúrgico como hulla para centrales térmicas. Para los clientes más alejados, la empresa ha empezado a usar barcos "baby cape", realizando hasta el momento dos envíos con 110.000 toneladas de carbón, a India y Vietnam, respectivamente.
El objetivo de NMR a principios de este año era alcanzar los 4 millones de toneladas movidas por el puerto de El Musel, entre cargas y descargas. La empresa da valor añadido al mineral que importa, mediante el cribado en el Puerto para clasificar las distintas calidades. Una parte del mismo, así como buena parte del carbón nacional que exporta por Gijón, se envía previamente a su embarque al lavadero de Hunosa en el Batán, algo que previsiblemente no será necesario en el caso de la antracita extraída de la mina de Pilotuerto.
