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El exfutbolista detenido por malos tratos queda libre: "Fue una discusión de pareja"

"Es la primera vez que me veo en un calabozo, pero he salido sin ningún cargo, igual que cuando entré", asegura José Manuel Colmenero

José Manuel Colmenero, a la izquierda, recibido por su pareja y familia a las puertas del Palacio de Justicia de Gijón después de quedar en libertad. M. L.

"Fue una discusión con mi pareja en la calle, a voces, pero nada más; he salido sin ningún cargo, limpio, igual que cuando entré. Es algo que le puede pasar a cualquier pareja, pero en ningún momento hubo ninguna agresión". Con estas palabras defendía ayer su inocencia el exfutbolista gijonés José Manuel Colmenero después de recuperar la libertad tras prestar declaración ante el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Gijón, que decretó su puesta en libertad sin ninguna medida cautelar al respecto. "Tengo que reconocer que discutir así, con aspavientos, y en plena calle está mal, pero de ahí a decir que la agarré del cuello como dijeron quienes llamaron a la Policía es mentira, y hace mucho daño", relató el deportista y exjugador del Sporting y Deportivo de La Coruña, entre otros equipos, en conversación telefónica con este periódico.

José Manuel Colmenero, de 46 años, fue detenido en la madrugada del domingo después de mantener una discusión con su pareja. La Policía Local de Gijón recibió una llamada sobre las 23.55 horas en la que se advertía de la presencia de un hombre discutiendo airadamente con una mujer, a la que supuestamente había cogido del cuello y zarandeado. Los agentes, con esos datos, se entrevistaron con los dos implicados, que estaban ya sentados en un banco de los Jardines de la Reina (y no en la calle Palacio Valdés como por error se informó en un primer momento). La mujer explicó que ambos habían estado discutiendo, declinó acudir a un centro de salud a ser examinada y tampoco quiso denunciar nada. Pero, pese a todo, los agentes procedieron al arresto de José Manuel Colmenero por un delito de malos tratos en el ámbito familiar. "Era de noche y a oscuras, a saber lo que vieron los que estaban a veinte metros", reflexiona el exfutbolista.

El deportista, que llegó a jugar la Liga de Campeones, pasó ayer por la mañana a disposición judicial, donde estuvo representado por la abogada María Fidalgo, tras su estancia en los calabozos. No había denuncia en su contra ni tampoco prueba alguna de los malos tratos que motivaron su arresto. Tampoco solicitud de medida cautelar alguna, como confirmó el Tribunal Superior de Justicia (TSJA). La jueza de Violencia optó por decretar su puesta en libertad tras tomarle declaración. No había ninguna denuncia previa entre ellos ni tampoco constan antecedentes judiciales de ninguna clase. "Es la primera vez que me veo en un calabozo detenido; pero ya la Policía me dijo que no les quedaba otra que llevarme detenido pese a que mi pareja dijese que fue una discusión entre los dos", confirmó Colmenero.

Sobre las dos de la tarde, el exfutbolista salía del Juzgado. Su familia y su pareja aguardaban desde hacía horas a las puertas para recibirle con un abrazo. "Ha sido muy doloroso para mi pareja y también para mi familia; no ha parado de sonar el teléfono y hasta me da reparo salir ahora a la calle, y la verdad es que esto no ha sido más que una discusión, y aunque tengo que reconocer que no se puede ir como un loco por la calle pegando gritos, no fue más que una cosa del calentón del momento. En ningún momento la agredí", insistió Colmenero. Además, reflexiona que "si de verdad alguien vio que la cogía del cuello o zarandeaba, ¿por qué nadie intervino? Yo si veo algo similar no me quedo quieto".

La causa, explica el TSJA, seguirá abierta para la práctica de alguna diligencia más, pero todo apunta al sobreseimiento de la misma.

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