Las obras de ampliación del servicio de Urgencias de Cabueñes han terminado esta semana, dentro del plazo previsto. A la espera de recibir el equipamiento y las camas de pacientes, se espera que la unidad abra "de forma inminente" con un aumento considerable de boxes de observación, urgencias pediátricas y una separación de circuitos que evite contagios cruzados por coronavirus.
Tal y como había aclarado Salud en junio, la nueva zona de observación cuenta con 15 boxes, permitiendo al servicio asumir a más pacientes a la vez y separar a los usuarios con síntomas compatibles de covid-19 del resto. Esta nueva zona, al oeste del pasillo principal de Urgencias, se financiaron con más de 240.000 euros, del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).
La reforma permite liberar la planta cero del hospital, que se había usado durante la primera ola de la pandemia para ampliar el servicio y había obligado a reubicar varias unidades. Cada nuevo puesto tendrá monitorización centralizada, carro de paradas con desfibrilador y marcapasos externo, electrocardiógrafo, robots de constantes vitales, ecógrafo, calienta sueros y respirador, entre otras mejoras.
El área de urgencias para adultos dispone actualmente de dos zonas diferenciadas para la estancia de pacientes: una con 7 puestos cerrados lateralmente y una sala de observación que permite la ubicación de otros 14. Tras esta actuación, el servicio dispondrá de 36 boxes en total. La atención pediátrica contará con su propio espacio.