El parón impuesto por el confinamiento a mediados de marzo se refleja en las estadísticas de compraventa de inmuebles en la ciudad. Los datos públicos solo llegan hasta el 30 de marzo, y con esa referencia, con el inicio de la crisis del coronavirus, las cifras no son buenas. Según los datos del primer trimestre del 2020 publicados por el Ministerio de Vivienda, el número de transacciones inmobiliarias en el municipio de Gijón ascendió a un total de 725, el 5,35 por ciento menos que en el primer trimestre de 2019. De ellas, 164 son transacciones de viviendas nuevas y 561 de segunda mano. Es decir, la venta de segunda mano en la ciudad supone ya el 77 por ciento de las transacciones, frente al 23 por ciento de la obra nueva.
Eso sí, el precio de la vivienda en Gijón durante el segundo trimestre de 2020, fue de 1.438 euros por metro cuadrado un 4,2 por ciento más que en el trimestre anterior, y un 36,5 por ciento menos desde el máximo alcanzado en el segundo trimestre de 2007, cuando llegó a 2.264 por metro cuadrado.
La desaceleración del primer trimestre ha dejado paso a una relativa oleada de esperanza. El 13 de marzo, día en que se anunció el estado de alarma, fue el último en que se hicieron visitas a viviendas, y el paró se prolongó hasta el pasado 11 de mayo. No obstante, las inmobiliarias mantuvieron su oferta en el escaparate digital, lo que permitió generar interés "en un momento histórico ya que nunca antes se había dado tanta importancia a vivir y sentirse a gusto en tu propia casa", apunta César Nozal, vicepresidente de la Federación de Asociaciones Inmobiliarias de España.
Pese a la caída en el número de operaciones, se ha logrado un récord histórico en cuanto a tráfico online a webs inmobiliarias y una gran generación de contactos online solicitando información de viviendas. De ellas, "en algunos casos eran viviendas que antes tenían menos demanda por encontrarse en un ámbito más rural, pero que disponen de zonas verdes y espacios más amplios, y es precisamente lo que la gente ahora más demanda", asevera Nozal. De tal manera que el criterio de centricidad "va cediendo algo de importancia al criterio de banda ancha de internet, que permita trabajar desde el domicilio con una óptima rapidez en internet".
Nozal destaca que los bancos siguen ofreciendo dinero y a precios baratos, "lo que facilita la financiación", los precios se mantienen estables, ya que el precio medio de la vivienda en Gijón se había ajustado entorno un 30 por ciento desde máximos en la ciudad en octubre de 2008 hasta hoy", y el tirón de lo rural se está dejando notar. Así las cosas, y aunque se vaticinan tiempos complicados, "de momento el mercado inmobiliario se mantiene vivo", afirma esperanzado.
