Dos grandes de la escena nacional, María Luisa Merlo y Pepe Ruiz, se han reencontrado tras varios años en Gijón de la mano del actor y director asturiano Eduardo Castejón. Ha sido gracias al rodaje del cortometraje "Un año después", una producción dirigida y coprotagonizada por el propio Castejón, y que cuenta con la actuación de la estrella argentina Laura Vignatti.
Se trata de "una historia en tiempos del covid, dura, triste y bella, sobre un matrimonio y su hijo que se tienen que enfrentar a un cáncer en medio de la pandemia", revela Castejón, que ha rodado la mayor parte del corto en una casa en la parroquia de Serín. "Ha sido una experiencia única poder juntar a Merlo y Ruiz, porque llevaban muchos años sin trabajar juntos pero la química que existe entre ellos es increíble", relata.
Pese a que se trata de un argumento teñido de dificultades, Castejón ha querido que el amor y la esperanza tengan protagonismo. Además, el corto se erige en "una llamada de atención hacia los más mayores". "No sólo en esta situación de pandemia sino en general. Parece que todo el mundo se olvida de ellos y no es justo cuando ellos lo han dado todo por nosotros", lamenta el actor y director.
El rodaje se ha llevado a cabo mayoritariamente en Gijón, pero con otras localizaciones exteriores que han pasado por Antromero, Salinas o La Felguera, junto con la aportación de Vignatti desde México. La cinta está ya en proceso de montaje con la música del compositor asturiano Alberto García y con un tema compuesto y grabado por Ainhoa Cantalapiedra, quien fuera ganadora de Operación Triunfo en las primeras ediciones del concurso.
La idea de Castejón es la de mover el corto por festivales como "Málaga o San Sebastián, y sin que suene pretencioso, poder llegar a los Goya". "Creo que es un argumento que llega por lo mucho que tiene de emocional y también de actual", señala el cineasta. Y que, de paso, pone a Asturias en el mapa del mundo cinematográfico. "En nuestra región tenemos unos platós naturales increíbles, con la posibilidad de pasar del mar a la montaña en unos segundos; no somos conscientes de la suerte que tenemos", dice Castejón.
