La Fiscalía de Área de Gijón solicita la condena de una clienta de un gimnasio de Gijón acusada de acosar sexualmente a un monitor de "fitness" del centro al que acudía, que hostigó durante meses para que tuviera relaciones con ella. Pese a que la dirección del centro tuvo que darle la baja como clienta por el acoso, la mujer no cesó en su conducta.

Según el relato de hechos que hace el Ministerio Fiscal, desde el mes de noviembre del año 2018 la acusada era socia de un centro deportivo de Gijón, donde trabajaba un monitor de "fitness" del que se encaprichó. La acusada le propuso, de manera reiterada, entablar relaciones sentimentales y sexuales, a lo que él se negó. A pesar de ello, la acusada insistía, le perseguía por las instalaciones del centro deportivo y le trasladaba sus pretensiones a otros trabajadores del centro.

Dado el delirante comportamiento de la mujer, el gimnasio dio de baja como socia a la acusada. "A pesar de ello, merodeaba por los alrededores del establecimiento intentando contactar con el monitor, que debía de ocultarse para que no lo abordara. La acusada trató de contactar con el hombre por Internet, sin lograrlo, vía audios, emoticonos de besos, mensajes, vídeos...", relata la fiscalía.

La acusación pública considera que los hechos son constitutivos de un delito de acoso sexual del artículo 184-1 del Código Penal. Y solicita que se condene a la acusada a 4 meses de prisión y que, además, indemnice al monitor con 3.000 euros por lo que le hizo sufrir su comportamiento. El juicio tendrá lugar mañana en el juzgad de lo Penal número 1 de Gijón.