El vicepresidente del Principado, Juan Cofiño, aseguró ayer que los sucesivos gobiernos autonómicos socialistas "no han tenido nada que ver" con la adjudicación de las obras de ampliación del puerto de El Musel "ni con los vericuetos administrativos por los que ha discurrido". Lo dijo en respuesta a una pregunta formulada por el grupo Vox en la Junta General, cuya diputada Sara Álvarez aseguró que el "silencio" mantenido por la Administración regional en este asunto "les hace más sospechoso si cabe". Cofiño, además, pidió a la parlamentaria que respete la separación de poderes. "Esto está en sede judicial y no hay nada más que hablar, le recordó.

Cofiño negó que exista una "quiebra patrimonial" por el caso y Álvarez criticó que el Gobierno asturiano se haya "mostrado invisible" y que "pone cara de no haber roto un plato".