El Principado acaba de decretar la entrada de Gijón en "alerta naranja" por la incidencia del covid-19 en la ciudad. Una decisión de las autoridades sanitarias asturianas que situan a Gijón en el mismo escenario que San Martín, Laviana y Langreo, que acaban de prorrogar ese estado hasta el próximo día 13. Junto a Gijón pasa a estar en esa situación el concejo de Ponga.

En ambos concejos la alerta naranja, que tendrá una vigencia de 14 días, se plasma en una llamada a las instituciones locales, sectores socioeconómicos y a la ciudadanía para que, conjuntamente y de manera coordinada con la autoridad sanitaria, realicen una vigilancia intensiva y extremen las medidas de control. Esta actuación no implica nuevas restricciones, pero intensifica las acciones de protección, vigilancia y seguridad.

Las autoridades sanitarias apelan a la responsabilidad individual de las personas que están pendientes del resultado de una PCR o que son consideradas contactos estrechos para que restrinjan su vida social, permanezcan en sus domicilios y cumplan rigurosamente la cuarentena.

El lavado frecuente de manos y el mantenimiento de una distancia interpersonal de seguridad de un metro y medio, como mínimo, con personas con las que no se convive constituyen también medidas eficaces para evitar la trasmisión del virus.