Trece de los seguidores rojiblancos que se enfrentaron a los agentes de la policía en los prolegómenos del derbi regional que se disputó en el estadio de El Molinón en septiembre de 2017 llegarán presumiblemente hoy a un acuerdo con las acusaciones particulares, la Fiscalía y la Liga de Fútbol para aceptar condenas que les eviten tener que entrar en prisión. Uno de ellos, que también llegará a acuerdo -para el que pedían mayor pena y con antecedentes por lesiones-, sí tendrá que cumplir con su pena de cárcel; el último de los 15 procesados, en cambio, tratará de demostrar su inocencia yendo a juicio. Ninguno de los abogados defensores ni de la acusación particular consultados, quiso ayer confirmar ni desmentir este acuerdo, que se ratificará si todo va según lo previsto hoy en la vista oral que acogerá la sección octava de la Audiencia.

Los diez aficionados rojiblancos que estaban acusados de un delito de atentado a agente de la autoridad deberán indemnizar a los afectados. De inicio, el fiscal solicitaba 22.710 euros de responsabilidad civil. Varios de los policías estuvieron de baja por las lesiones y quemaduras sufridas a la llegada del autobús en el que viajaba la plantilla del Real Sporting tras el lanzamiento de vallas delimitadoras, piedras, botellas de cristal, sillas, mesas, contenedores de basura y bengalas, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía.

Dos años para volver al campo

El acuerdo que presumiblemente se alcance esta mañana incluye además cinco años de expulsión de los campos deportivos para todos los que acepten, una sanción sensiblemente inferior a la década que de inicio solicitaba la Liga de Fútbol. De cerrarse el pacto en estos términos, tan solo les quedarían dos años para poder volver a entrar en El Molinón o cualquier otro campo, pues el Juzgado de Instrucción les impuso esa prohibición como medida cautelar tras ser detenidos por la Policía Nacional.

El juicio, fijado para cinco sesiones, es posible que se vea acortado en el tiempo a la vista de que, en principio, solo uno de los acusados negará los cargos que se le atribuyen.