La Fiscalía del de Área de Gijón solicita la condena de un acusado de hacerse pasar por odontólogo en una clínica dental que montó en un piso de Gijón. La vista oral está señalada mañana, 27 de octubre, en el Juzgado de lo Penal número 2 de Gijón, a las 9,40 horas.

El Ministerio Fiscal sostiene que el acusado tenía acondicionada una habitación como clínica dental en un piso de Gijón donde, al menos durante el año 2018, realizaba actividades propias de esta profesión sanitaria pese a carecer de la preceptiva titulación académica válida para ello, pues ni está licenciado/graduado en odontología, ni en medicina y cirugía-estomatología. Y así, entre otros pacientes, el día 2 de mayo de 2018 atendió a su víctima, quien tras conocer por una amistad la existencia de esta clínica con unos precios asequibles y desconociendo la falta de habilitación del acusado, acudió a la misma por un problema de movilidad de una pieza dental.

El acusado le indicó que era preciso su extracción y la colocación de un implante, a lo que ella accedió, procediendo el acusado a su ejecución. Para su abono, la víctima ingresó en la cuenta designada por el acusado 100 euros al mes hasta noviembre de 2018, en que cesó la actividad de la clínica tras la detención del acusado. En total, 600 euros que XXX reclama.

En las mismas condiciones atendió a a una segunda víctima, iniciando el 24 de julio de 2018 un tratamiento de extracción de piezas y colocación de cuatro implantes, por los que percibió 2.800 euros hasta la suspensión del tratamiento. Este perjudicado no hace reclamación alguna al haber sido indemnizado por el acusado.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de intrusismo del art.403-1, párrafo primero del Código Penal. Y solicita que se condene al acusado a la pena de multa de 20 meses con una cuota diaria de 15 euros (9.000 euros), con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago. Además, el Ministerio Fiscal solicita que el acusado abone las costas procesales y, en concepto de responsabilidad civil, que indemnice a la víctima con 600 euros.