"La iglesia no cierra las puertas a nadie, sobre todo a los que sufren y necesitan ayuda". Este uno de los mensajes transmitidos por el párroco de San Pedro, Javier Gómez Cuesta, a los cinco hosteleros que este viernes se encerraron en el templo gijonés para denunciar la precaria situación en que se encuentran por el cierre de los negocios hosteleros que aún mantiene el Principado de Asturias para hacer frente a la segunda ola de la pandemia de coronavirus. Gómez Cuesta saludó el viernes por la tarde a los cinco hosteleros, cuatro hombres y una mujer, que permanecerán en la parroquia durante los próximos días.
Javier Gómez Cuesta, además, ha reflejado sus impresiones sobre la situación que atraviesan estos trabajadores, y el resto de hosteleros de la región, en un escrito publicado en LA NUEVA ESPAÑA que puede leer de forma íntegra pinchando aquí.
