La fábrica gijonesa de Moreda-Rivière Trefilería, con un ERTE aprobado ante el temor a lo que pudiera traer la crisis del coronavirus, ha acabado teniendo que contratar a eventuales al estar recibiendo un mayor número de pedidos que en un año convencional. La empresa atribuye a “las condiciones atípicas de este año” el aumento de la demanda de sus productos, cierres metálicos de distintos tipos que se distribuyen fundamentalmente a grandes superficies de bricolaje, tanto en España como en otros países, en especial Francia.
La fabricación en Trefilería Moreda es cíclica a lo largo del año, ya que se venden más cierres metálicos en primavera y verano que en otoño e invierno. De ahí, que habitualmente su plantilla sea mayor también en los meses de buen tiempo. Sin embargo, este año está teniendo una producción inusual para esta época del año, que le ha llevado a tener que contratar a través de una ETT a cerca de 50 eventuales, que se suman a los 230 trabajadores fijos de plantilla que siguen en sus puestos.
El ERTE está, pero de momento no se lo espera. Una agradable sorpresa para los trabajadores, que desconocen cuál puede ser la explicación. La plantilla de Trefilería Moreda sólo estuvo regulada de empleo durante tres semanas de marzo, al inicio del confinamiento, y no tanto por falta de pedidos como por las dificultades para entregarlos en destino y para recibir aprovisionamientos, en un momento de paralización de gran parte de la actividad económica.
El ERTE por causas de fuerza mayor dejó de aplicarse pasadas esas tres semanas. Ahora la compañía tiene en vigor un ERTE por causas organizativas para el conjunto de la plantilla, que entró en vigor el pasado 30 de septiembre y concluye el diciembre de 2021.
Se trata de una precaución para lo que pueda venir, visto lo que está ocurriendo en otras industrias del entorno, pero por el momento no está siendo necesario. Una de las claves para que la situación siga así es que Francia no acabe imponiendo mayores restricciones por la pandemia, debido al peso que tienen para la empresa las exportaciones al país galo. En una situación en la que la pandemia del coronavirus está poniendo en aprietos a gran parte de las empresas, incluyendo a las industriales, Trefilería Moreda se ha convertido en una excepción.
