Lo que apuntaba a una anodina junta local del PP de Gijón se convirtió ayer en una tensa reunión que acabó con peticiones para que dimita el presidente local, Mariano Marín. Tres miembros del máximo órgano de la formación en la ciudad exigieron a su líder que se haga a un lado ante su “inacción” durante el último año y medio (en ese período la actividad interna estuvo prácticamente muerta). Lo hicieron en un encuentro telemático que comenzó con la intervención de la presidenta regional, Teresa Mallada (acto seguido abandonó la cita y no presenció los reproches). “Vamos caminando desde hace tiempo de fracaso en fracaso”, dijeron. Los críticos fueron el histórico dirigente y exconcejal Pedro Muñiz, Francisco Alonso y Fernando Martínez.
“¿Hasta cuándo piensan seguir así?”, enfatizó Martínez en su discurso, en el que remarcó que “ha llegado el momento del cambio porque el PP se lo merece”. “Es necesario recuperar el respeto de los afiliados y los simpatizantes”, añadió el dirigente. En la misma línea se expresaron Alonso y Muñiz, que reprochó la falta de contenido político del encuentro de ayer. Los tres miembros de la junta local llamaron a un cambio en la dirección local del partido, a la que Marín llegó en febrero de 2015 tras un congreso que un sector quiso anular por vía judicial. “Entre nuestra masa social tenemos grandes profesionales que destacan en sus ámbitos, trabajan duro día a día y acumulan conocimiento y experiencia para avanzar hacia retos mayores”, enfatizaron los dirigentes críticos, que pidieron a Marín su marcha para “dar paso a personas que sean capaces de iniciar un nuevo proceso ilusionante”. “Tenemos que ser honestos, ha llegado el tiempo de sembrar nuevos comienzos ante la falta de ideas y de entusiasmo”, dijo Martínez, en una alocución secundada explícitamente por Muñiz.
Estos retos mayores son, en sus palabras, “crear un proyecto ganador que nos lleve a una representación en el Ayuntamiento como merecemos”, lejos de los tres ediles conseguidos en las dos últimas elecciones municipales, “un bagaje muy pobre”. Y un paso más, ya en clave regional: aupar a Teresa Mallada como próxima presidenta del Principado, entendiendo que esa labor no está asegurada con la actual junta directiva local. “No estamos en el camino que nos lleve a mejorar los resultados”, insistieron los tres afiliados, que censuraron a Marín que incumpliera los compromisos adquiridos hace un mes, como la puesta en marcha de grupos de trabajo para “arrancar” el partido. “Hay que hacer autocrítica y una profunda reflexión”, dijeron. E invitaron a dar un paso al frente “a todos los que deseen un futuro esperanzador lejos de la desidia y la desgana”.
