“Tengo ganas de conocer bien Gijón”. La frase la pronunció ayer Gracia Sánchez de Toca, que a falta de cumplimentar los trámites administrativos pertinentes, será la cuarta marquesa de Somió. Afincada en Madrid, hereda un título al que su padre, el general y estudioso de la literatura mística José María Sánchez de Toca, le tenía “gran aprecio”. Nacida en 1965, conoce Gijón por un viaje que realizó junto a su marido hace casi un lustro. Disfrutó de buen tiempo y dio largos paseos por la mayor ciudad asturiana. Sus pasos la llevaron hasta Somió, una parroquia que quiere conocer más en profundidad. Cuando la situación sanitaria lo permita, tiene pensado organizar un viaje para honrar a su padre.
Gracia Sánchez de Toca recibe el título con “sabor agridulce”. José María Sánchez de Toca falleció en marzo del año pasado en Madrid, víctima del coronavirus. Doctorado en Historia en 2007 con una tesis sobre el sitio de Astorga en la Guerra de Independencia, fue, además de un aventajado militar, un gran estudioso de figuras de relevancia en la mística católica. También fue un consagrado escritor. Colaboró en numerosas revistas y publicó libros y artículos especializados dedicados a los Tercios de España y al Gran Capitán. Aunque estuvo en varias ocasiones en Gijón y en Somio, “le hubiera gustado conocer más la ciudad y la parroquia”, explica su hija. En 2005, fue el ganador del premio local de literatura “Avalón” por un relato de ciencia ficción. “Mi padre fue siempre una persona muy discreta”, asegura Gracia Sánchez de Toca.
El proceso de sucesión ya se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado, tal y como informó LA NUEVA ESPAÑA. Gracia Sánchez de Toca será la segunda mujer que ostente el título de Marquesa de Somió. Casada y con cuatro hijos, es funcionaria y reside en el céntrico barrio madrileño de Justicia. Heredar el título nobiliario de su progenitor le produce también satisfacción. La distinción fue creada en el 13 de octubre de 1888 durante la minoría de edad del rey Alfonso XIII, en plena regencia de María Cristina, a favor de María Cristina Muñoz y Bernaldo Quirós, casados el 11 de febrero de 1888, y cuyos familiares, los duques de Riánsares y duques de Tarancón, estaban muy vinculados a Somió. “El título no representa hoy en día lo que podía ser en el pasado, pero recibirlo es una alegría por el aprecio que le tenía mi padre”, asegura Gracia Sánchez de Toca.
La futura Marquesa de Somió tiene en mente realizar un nuevo viaje a Gijón para rememorar el que hizo hace cinco años, durante un puente de la Inmaculada. Cuenta que la meteorología fue favorable y que le agradó la ciudad y también la parroquia que da nombre a su título. Quiere ahora, a modo de homenaje, regresar a ese lugar al que tanto cariño tenía su padre.
