Una familia del centro de Gijón denunciará ante la Organización de Consumidores el cobro –según los afectados, “excesivo”– de 664 euros por parte de una empresa de cerrajería que abrió el pasado 27 de enero la puerta de una anciana que se había caído estando sola en casa. “Ni siquiera repararon la cerradura y el servicio se hizo en un día laboral a la una de la tarde”, lamentan.

La mujer se había caído estando sola en casa –ahora está ingresada en el Hospital Begoña tras dañarse la pelvis– y con su cuidadora fuera, haciendo la compra. Se había olvidado las llaves así que, al regresar, y viendo lo urgente de la situación, con la ayuda de conocidos y vecinos localizó a una empresa de cerrajería que se ofertaba en internet en Gijón, aunque su sede está en Alcobendas. La factura recoge un plus de 69 euros por “servicio urgente”, 45 por desplazamiento, 240 por mano de obra –la intervención “duró una hora”, dicen los reclamantes– y, el resto, por materiales.