Un ejército de “desinfectadores” recorre a diario los colegios de Primaria de Gijón para atajar al coronavirus, que ha contagiado u obligado a dejar en cuarentena a centenares de niños desde que comenzó el curso. Se trata del dispositivo especial puesto en marcha desde la Empresa Municipal de Servicios de Medioambiente Urbano (Emulsa), que suma ya más de un centenar de intervenciones de aulas afectadas por casos positivos en los centros de la ciudad.
Emulsa ha reforzado su plantilla destinada a la limpieza de los centros educativos en más de 50 operarios , con una media de 175 activos para dar respuesta a la crisis sanitaria del coronavirus. En septiembre, con el inicio de curso, se elaboró un Plan Especial de Limpieza de Colegios que incluye un protocolo específico, elaborado por los técnicos y que se basa en las directrices de la Consejería de Educación y de las autoridades sanitarias.
El protocolo además ha sido adaptado a cada colegio en respuesta a las peticiones de los equipos directivos y a sus distintas características. Y la gran novedad es la contratación por parte de Emulsa de una empresa especializada para ejecutar la limpieza extraordinaria en cada una de las aulas donde se producen contagios por coronavirus. Son los técnicos embutidos en sus equipos de protección individual que proceden a la nebulización del aula con un virucida, una actuación especial en las aulas en las que se detecta un positivo, así como en las aulas covid en las que se aísla a los estudiantes en cuanto se detectan síntomas compatibles con la enfermedad.
Además, de forma diaria, se limpia y desinfecta a fondo cada rincón de los colegios, y los directores y asociaciones de padres y madres (AMPA) están encantados. “Sólo se puede decir que mejor, imposible. Hacen una labor fantástica y el colegio nunca ha estado más limpio”, señala Yolanda Fueyo, directora del colegio Jovellanos.
El plan de limpieza y desinfección ha adaptado los horarios del personal de Emulsa al horario lectivo, y ahora se procede a la limpieza de los aseos “varias veces al día, utilizando siempre productos higienizantes y desinfectantes incluidos en las listas de virucidas aprobados por la Administración”. Otra de las acciones incluidas es el aumento de la frecuencia en la limpieza de superficies sensibles como pomos, pasamanos, ascensores, teléfonos, mostradores, puertas y cualquier elemento susceptible de que sea tocado frecuentemente con las manos, de tal manera que siempre hay un especialista bayeta en mano dispuesto a pulir y abrillantar para acabar con todos los virus y gérmenes posibles.
Violeta Menéndez, directora del Príncipe de Asturias, valora mucho “el cambio de horario de mañana porque mejora mucho el servicio”. “Estamos muy contentos”, afirma. “El protocolo se cumple a rajatabla”, asegura por su parte Geles García, directora del Cervantes. Las familias están también “muy contenta” con esta labor, añade la docente.
Para que todo eso se lleve a cabo con garantías, el personal de la empresa destinado a la limpieza de colegios ha recibido una formación específica con medidas como la higienización diaria de su ropa de trabajo e incluso equipos de protección personal, en algunos casos. Desde el verano se han limpiado a fondo los colegios de arriba abajo tres veces, y nadie escatima en esfuerzos en patios y actividades extraescolares. Todo un equipo de “salvamento” ante el covid que funciona como un reloj suizo para decir poner coto a la pandemia en clase.
