La gijonesa Silvia A. M. se sentará en el banquillo de los acusados de la Sección Octava de la Audiencia el próximo 10 de mayo para responder por el asesinato de su bebé recién nacido, al que supuestamente mató tras asestarle 53 puñaladas antes de tirarlo a un contenedor de basura ubicado justo en frente de su casa, en Nuevo Roces. La vista oral, que tendrá en frente a la magistrada Paloma Martínez Cimadevilla, se alargará hasta el día 14 para acoger los testimonios de peritos, policías y amigos y familiares tanto de la acusada como de su expareja y padre del bebé, que quedó exonerado de toda responsabilidad en el brutal crimen. Además, está previsto que hoy se inicie el sorteo para elegir a los componentes del jurado popular al que se enfrentará Silvia A. M., en prisión preventiva. 

El escrito de acusación del fiscal describe que Silvia A. M. dio a luz al bebé, de 2.670 gramos de peso, tras una gestación completa en la mañana del 1 de agosto de 2019, cuando estaba sola en el piso de Nuevo Roces en el que vivía con su novio, Daniel B. S., exonerado del crimen. Tras el parto, y antes de realizar búsquedas por internet como "cuánto se tarda en morir por hemorragia", asestó 53 puñaladas a su hijo con un cuchillo de cocina con mango de madera, según el sumario al que accedió LA NUEVA ESPAÑA en el mes de enero. Según el fiscal, Silvia A. M., que de ser condenada deberá indemnizar con 50.000 euros a su expareja, era plenamente consciente de lo que hacía y descarta "alteración alguna de sus facultades".

Tras el crimen, metió al bebé, unido por su cordón umbilical a la placenta, en una mochila que utilizaba habitualmente su novio -clave en la investigación porque había una foto en Twitter donde aparecía- y lo tiró a la basura donde, en la madrugada del 2 de agosto, lo encontró un vecino. Ella siempre actuó de espaldas al padre biológico del niño y a toda su familia. "Nadie conocía su estado", afirma el fiscal. Para prevenir a su novio, dada la gran cantidad de sangre que había en la casa, Silvia A. M. le llamó por teléfono para decirle que había sufrido un sangrado masivo por un quiste en un ovario, algo que como se demostró en el examen practicado en Ginecología del HUCA por orden judicial era mentira.

El padre del bebé también ejercerá la acusación particular contra su expareja sentimental. Él también pedirá la prisión permanente revisable para Silvia A. M. por este brutal crimen que conmocionó a toda la región.