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Lee aquí la carga íntegra de Mariano Marín a Pablo Casado: “Ofrecieron cargos y dinero para firmar contra mí”

“La campaña fue organizada y ejecutada por mi secretario general”, asegura el expresidente del PP de Gijón

Por la izquierda, Teresa Mallada, Alberto López-Asenjo, Pablo González y Mariano Marín, en 2019. JUAN PLAZA

“En una época donde te escucho repetir incansablemente lo importante que es ensanchar la base de nuestro partido para construir ‘la gran casa del centroderecha español’ es verdaderamente curioso observar lo que se hace en Asturias: dejar un partido cada vez más menor y minoritario, pero eso sí, de personas subyugadas o aterrorizadas (me temo que son mayoría los segundos)”. Esta es una de las frases que figura en la carta remitida hace dos días por el expresidente del PP en Gijón y exdelegado del Gobierno en Asturias, Mariano Marín, al líder nacional de la formación, Pablo Casado, para anunciarle su decisión de darse de baja tras “la purga” que, a su juicio, está haciendo la presidenta regional, Teresa Mallada. A esa misiva, que ya está en la sede central de los populares en Madrid, ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA y que puedes leer de forma íntegra pinchando aquí.

En ella hay reproches tanto para la dirección regional como para la nacional –incluido al propio Casado– y también para el secretario general del PP gijonés, Pablo González. El escrito es el punto y final de Marín a su paso por el PP, tras haber dimitido como presidente local y haberse dado de baja como afiliado el pasado miércoles, un día después de que el comité de derechos y garantías regional le comunicara la apertura de un expediente disciplinario en base al escrito remitido por 40 de los 68 miembros de la junta local, reprochándole la inactividad de los órganos del partido durante un año, que la sede esté en la práctica cerrada, que en plena campaña de las pasadas elecciones municipales descalificara al candidato a la Alcaldía, Alberto López–Asenjo, entre otros aspectos.

“Se me abre un expediente disciplinario para dar apariencia de legalidad al proceso de purga” por parte de la presidenta regional, señala Marín en la misiva, en la que advierte a Pablo Casado de que “seguramente, esta no sea la última carta, queja o petición de amparo que recibas de Asturias”. “No fue suficiente echar a todos los diputados autonómicos de la anterior Legislatura a la calle, cesar a 26 personas en el primer Comité Ejecutivo Regional, ni expulsar del partido al anterior secretario general autonómico. Tampoco fue suficiente forzar la marcha, previa apertura de expediente disciplinario, del exportavoz municipal y concejal de nuestro partido en Aller, ni lo será echar ahora al presidente local de Gijón. Querrá más”, asevera.

La carta no es la primera que Mariano Marín –persona leal a la expresidenta del PP de Asturias, Mercedes Fernández– remite al presidente nacional del PP. El pasado 13 de septiembre ya le envió otra para darle su visión del partido. “Cuál fue mi sorpresa cuando Teresa Mallada era conocedora del contenido de dicha carta y la exponía como motivo más que suficiente ‘para echarme del partido’”, indica en el escrito.

Además, Marín relata a Pablo Casado su versión del encuentro que él mantuvo con Teresa Mallada y el secretario general del PP de Asturias, Álvaro Queipo, el pasado 15 de enero en el que le dieron un ultimátum para dimitir como presidente local, un encuentro “donde recibí amenazas, insultos, chantajes y ataques personales”. Lejos de ceder, Marín mantuvo el pulso con Mallada negándose públicamente a aceptar que su relevo se produjera por “dimisiones forzadas ni por sustituciones a dedo” en vez de por un congreso.

Aquellas palabras motivaron la primera recogida de firmas entre miembros de la junta directiva local para incluir un punto en el orden del día de la reunión del mes pasado con el que reprobar a Marín. La negativa del entonces presidente local a aceptar esa votación, motivó la segunda recogida de firmas para solicitar al comité de derechos y garantías autonómico que lo expedientaran.

El expresidente del PP de Gijón, sostiene en la carta que ha enviado a Pablo Casado que fue objeto de una campaña para forzar su dimisión, incluida la “recogidas de firmas donde se ofrecían cargos y dinero a los firmantes”, en referencia a esos escritos rubricados contra él por 40 integrantes de su junta directiva local. “Dicha campaña ha sido organizada y ejecutada por mi secretario general local, Pablo González, hoy portavoz adjunto de Teresa Mallada en la Junta General del Principado. Sé que esto puede resultarte extraño, pero no lo es tanto si se atiende a la trayectoria personal de Pablo: cargo público y cargo orgánico de relevancia con todas las direcciones locales y autonómicas durante los últimos 18 años (con paso breve por otro partido político incluido) y siempre con un mismo proceder: traicionar y destruir a la dirección saliente para asegurarse un futuro en la dirección entrante. No podía fallar a su tradición”, asegura.

Frente a esto, Marín contrapone su “leal silencio” y su planteamiento de facilitar una “transición tranquila” mediante la celebración de un congreso local del partido. “Así se lo trasladé a la presidenta regional, Teresa Mallada, al secretario general, Álvaro Queipo, y a la propia dirección nacional en la persona del secretario de Organización, Alberto Casero. Pero fue del todo punto imposible porque no se quería el bien del partido, solo se quería continuar con la purga”, subraya.

Las versiones de lo acontecido en las últimas semanas en el PP de Gijón difieren en función de cada implicado. Entre miembros críticos con el expresidente en la junta directiva local había cuajado la idea de que la salida de Marín era la única forma de reactivar el partido en la ciudad y que su negativa a echarse a un lado sólo buscaba torpedear la labor de Teresa Mallada y sus opciones en futuras convocatorias electorales, además de sospechar que Marín actuaba bajo directrices de la antecesora de Mallada en el cargo.

En cambio, desde el entorno más próximo a Marín lo que se ha venido manteniendo es que su resistencia buscaba evitar el paso franco a Pablo González, que podría ser elegido tras su dimisión nuevo presidente por la junta directiva local, mientras en un congreso tendría contrincantes. Tras la dimisión se está abriendo paso como opción con más chances, la puesta en marcha de una gestora.

Mariano Marín, en el puerto deportivo. Juan Plaza

Foro se mete en el lío interno del PP: “Están fuera de control”

Sobre la polémica del PP en Gijón se manifestó también el secretario general de Foro y su portavoz en la Junta General, Adrián Pumares, quien aprovechó para “vengarse” en redes sociales de las críticas vertidas por Álvaro Queipo, “número dos” del PP, que “llegó a decir en diciembre que no sabía qué diputado de Foro, si el expulsado o el que permanece en el partido, estaba fuera de control”. Ante la marcha del hasta ahora presidente del PP en Gijón, Mariano Marín, entre acusaciones a Teresa Mallada y Queipo de “chantajes y amenazas” contra él, Pumares opinó en redes sociales: “Al final, el que resulta estar fuera de control es el flamante secretario general del PP de Asturias”. A ojos del forista –que publicó estos mensajes en sus redes sociales–, “desde el inicio de la legislatura, Teresa Mallada y Álvaro Queipo han basado parte de su discurso en valorar cuestiones internas de Foro Asturias”. “Lo que demuestran los malos modos con los que Marín es desalojado de su cargo es que la única oposición hoy en el Ayuntamiento de Gijón es Foro”, remató Pumares.

Los cinco momentos claves del proceso, en LA NUEVA ESPAÑA

  1. Mallada exige a Mariano Marín que dimita por su inacción al frente del PP local | 24.01.2021 (Pincha en la fecha para leer cada noticia)
  2. Marín mantiene el pulso con Mallada y rechaza dimitir “forzado” del PP de Gijón | 26.01.2021
  3. Miembros de la junta local del PP promueven la reprobación de Marín | 27.01.21
  4. Masiva recogida de firmas en el PP para abrir expediente a Marín | 10.02.2021
  5. El PP se prepara hoy para la suspensión de Mariano Marín como presidente local | 16.02.2021


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