La dirección de la Autoridad Portuaria de Gijón presentó ayer a su consejo de administración las conclusiones preliminares del estudio que ha encargado a la Universidad de Oviedo sobre el origen de las manchas de carbón que tiznan periódicamente la playa de San Lorenzo. El informe desliga el mineral que llega a la playa de la actividad actual en los muelles de El Musel, considerando que puede proceder de depósitos de carbón anteriores y que se trata de un mineral que lleva mucho tiempo en el agua.
El Puerto contrapondrá este informe de la Universidad al encargado por el Ayuntamiento de Gijón al Incar, que concluyó que la mayoría del carbón que aparece en la playa es imposible que proceda del hundimiento del buque “Castillo de Salas”, apuntando a que su origen es con alta probabilidad de El Musel, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA en diciembre del pasado año.
En las explicaciones que ayer dio la dirección portuaria sobre el informe de la Universidad no sólo se apuntaron cuestiones analíticas del carbón, sino también de la orografía submarina para sostener que si cae carbón a las aguas del Puerto, ahí se queda.
La argumentación suscitó debate en el Consejo, donde los planteamientos del Puerto no acabaron de convencer ni al Principado ni al Ayuntamiento. Hace tiempo que ambas administraciones ya vienen reclamando a la Autoridad Portuaria que corrija deficiencias que consideran que se traducen en vertidos de carbón al agua y de ahí a las playas. Ayer insistieron. Por un lado, la Alcaldesa de Gijón, Ana González, pidió que se tomen las medidas adecuadas para impedir que siga llegando carbón al agua, con independencia de lo que éste tarde en llegar posteriormente a la playa, como fórmula para mejorar la situación en el futuro. Por otro lado, representantes del Principado cuestionaron la fiabilidad técnica de los datos del informe encargado por la Autoridad Portuaria.
La argumentación no apacigua al Principado ni al Ayuntamiento, que exigen medidas para evitar vertidos en el consejo de la Autoridad Portuaria
En la reunión del Consejo, por otra parte, también se abordó la situación del proyecto de Baleària para la autopista del mar, a preguntas de la patronal FADE. El Puerto informó de una reunión sobre este tema en las próximas semanas entre Puertos del Estado, Baleària y los puertos de Nantes y Gijón, sin dar por descartado que la ruta marítima pudiera reactivarse a mediados de este año, como estaba previsto inicialmente.
Paseo para Areces
El Consejo aprobó además por unanimidad dar el nombre de Vicente Álvarez Areces al paseo que circunda la playa de Poniente, espacio de cuya recuperación fue impulsor en su etapa de alcalde de Gijón. El Puerto atendió así la petición realizada por diferentes personalidades y entidades ciudadanas.
Los consejeros también analizaron el cierre económico provisional de las cuentas del año 2020, con un beneficio neto de 847.925 euros, frente a los 4.778.000 de 2019, un retroceso vinculado tanto a la reducción de actividad económica por la pandemia del coronavirus como a bonificaciones y aplazamiento de tasas.
El Consejo también aprobó varias concesiones, entre las que figuran: 5.000 metros cuadrados a Marítima del Principado en la parte trasera del Muelle Olano para acopio de material siderúrgico, mercancía general y graneles sólidos; a la Cofradía de Pescadores “Virgen de la Soledad”, 116,50 m2 para la explotación de depósitos para la estabulación de mariscos en el muelle del Rendiello; y a Casitran se amplía en 6.035 m2 la concesión otorgada en octubre para instalación de depósito de contenedores que tenía una superficie de 8.951,70 m2, por lo que tras esta ampliación la concesión dispondrá de una superficie de 14.986 metros cuadrados.
