La alcaldesa de Gijón, Ana González, cerraba ayer su comparecencia en la comisión de Urbanismo pidiendo unidad política para conseguir, esta vez sí, la estación intermodal que Gijón lleva esperando dos décadas. “Unámonos en una acción conjunta por ello. Gijón lo necesita, Asturias lo necesita y es de justicia”, sentenció. Era el colofón a una sesión donde se habló más de los desencuentros y cambios de criterios, objetivos y ubicaciones en la historia del plan de vías que de unas novedades de futuro que la Regidora no llegó a desvelar del todo ante los ediles de la oposición.

Sin decantarse por ninguna de las dos opciones que el Ministerio ha puesto sobre la mesa –ampliar la actual estación de Sanz Crespo o hacer una construcción nueva en ese mismo entorno–, González reivindicó que “hay que centrar el proyecto en lo posible y dentro de ello, en lo bueno y necesario para nuestra ciudad”. Ya fuera de la comisión y analizando la propuesta de Sanz Crespo, aseguró que “ahora estamos en la economía circular parece más lógico la reutilización y mejora de lo que hay”. “Aunque antes se hicieran estaciones provisionales para luego tirarlas”, dijo.

Un elemento que la Alcaldesa puso en valor ante la oposición fue que el Ayuntamiento y el Principado vayan de la mano en el nuevo objetivo. “Eso ha permitido tener dos voces con el mismo mensaje en el Ministerio, y es importante”, indicó. Precisamente desde el Gobierno del Principado, el viceconsejero de Infraestructuras y Movilidad, Jorge García, habló de un “paso adelante”. “Las dos propuestas que han presentado son plenamente realizables. Una de ellas, la de la renovación de la estación provisional, acorta los plazos y prevé la puesta en marcha del metrotrén en el menor plazo posible. Además, aprovecha infraestructuras ya existentes, como son el tubo del metrotrén y la estación provisional. Se trata de un proyecto viable y que cumple los requisitos perfectamente”, dijo. Para García es “comparable a lo que ocurrió en León, donde también hubo una estación provisional que pasó a ser definitiva, con notable éxito”.

Ni lo tienen tan claro ni son tan optimistas, ni parecen dispuestos a secundar el llamamiento a la unidad de la Alcaldesa los representantes de los cinco partidos de la oposición en el Ayuntamiento. “Es una tomadura de pelo a los gijoneses que, tras casi veinte años de proyectos y estudios, la solución pase por hacer definitiva una estación que se concibió como provisional, algo que dudamos asegure la intermodalidad y la supresión de barrera ferroviaria que eran los objetivos del plan de vías”, indicó Rubén Pérez Carcedo, edil de Ciudadanos y consejero de Gijón al Norte. El concejal reprochó a la Alcaldesa haber dado más información dentro que fuera de una “comisión decepcionante”. “Ni arrojó certidumbres, ni fue capaz de despejar dudas”, aseveró.

Para Jesús Martínez Salvador, portavoz de Foro, no hay razones que justifiquen que la estación intermodal no se haga frente al Museo del Ferrocarril y soterrada como propuso Foro cuando tenía la Alcaldía de Gijón y como figura en el convenio aún en vigor. “Desvirtuar el proyecto eliminando el soterramiento y la centralidad para ahorrar un 8% es un disparate”, explicó el edil, para quien el cambio que se reivindica mantiene la brecha entre barrios y consolida la pérdida de viajeros del ferrocarril en Gijón. “La Alcaldesa está trabajando para Madrid, para Ferraz, para el PSOE y para ella, no para Gijón”, criticó con contundencia el edil.

Alberto López-Asenjo, portavoz municipal del PP, afirmó que “vamos de anuncio en anuncio y usando la provisionalidad como excusa para la falta de gestión y compromiso con los gijoneses”. “Cuando se rompen los consensos y se pretende imponer una decisión con estratagemas y subterfugios tenemos un serio problema”, dijo. No muy alejada es la reflexión de Laura Tuero, portavoz de Podemos-Equo Xixón, que detecta “una muestra más de cómo se están haciendo las cosas desde el gobierno local en torno a este tema”. “A golpe de una nueva ocurrencia, anunciada sin hablar con nadie y sin presentar ningún dato ni estudio. No saben dónde ni cómo se va a financiar y qué coste va a tener para las arcas municipales y ya están dando plazos”, indicó.

Tampoco salió precisamente encantado de la sesión el portavoz de Vox. Eladio de la Concha entiende que “poner de nuevo en valor la estación de Sanz Crespo, cuya ubicación fue la causa de la pérdida de cientos de miles de pasajeros durante estos años, parece más bien una broma pesada o una chapuza de los que gestionan la ciudad a base de ocurrencias o intereses que, desde luego, no son los de la gran mayoría de gijoneses”.