Dos empresarios, padre e hijo, se sentarán hoy en el banquillo de la Sección Octava de la Audiencia Provincial acusados de un delito de estafa contra una entidad siderúrgica, por la que afrontan una pena de cárcel de dos años y medio cada uno a petición de Fiscalía y una indemnización 123.628 euros.

Los dos acusado integran una empresa que mantenía “desde hace años”, según el relato fiscal, una relación comercial con la siderúrgica. Los acusados acabaron contrayendo una deuda por impagos de pedidos que ascendía a 123.628 euros tras la adquisición de múltiples chapas y piezas oxicortadas.

El “truco” que alega Fiscalía es que, de los dos acusados, el administrador único era el hijo, pero antiguamente lo había sido su padre. En el momento de la presunta estafa, sin embargo, el padre no ostentaba ningún cargo. De ahí que, de común acuerdo y con ánimo de defraudar, generando apariencia de normalidad y honradez”, el hijo propuso a la siderúrgica “librar cuatro pagarés por importe de 30.907,19 euros cada uno, interviniendo como avalista el segundo acusado”, su padre, “generando así una falsa apariencia de restauración de la normalidad”. La siderúrgica volvió a admitir encargos, pero los pagarés fueron devueltos y les supuso un gasto de 5.500 euros, un importe que la Fiscalía también pide que sea devuelto. El juicio se celebra hoy a las 10.00 horas.