La terminal de minerales de El Musel, Ebhisa, operó ayer con normalidad pese al inicio de la huelga de tres días convocada por la sección sindical de CSI, secundada por menos de una docena de trabajadores en el turno de tarde y ninguno en el de mañana.

La protesta coincide con el juicio celebrado ayer por la no conversión en indefinido de uno de los siete trabajadores de contrato relevo afectados por esa decisión de la empresa, más la finalización del contrato de otros dos trabajadores que tendrán lugar respectivamente hoy y mañana.

Un grupo de unas veinte personas, entre trabajadores de Ebhisa y otras personas vinculadas a CSI, se concentraron ayer a la puerta del Palacio de Justicia de Gijón para apoyar al trabajador durante el juicio por su demanda de despido. Se trata del segundo pleito. La primera demanda presentada por otro relevista fue desestimada por el juzgado de lo social número dos de Gijón, si bien va a ser recurrida ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias, explican fuentes del sindicato, que además cuestionan el cambio en la jornada laboral, señalando que se han trabajado la mayoría de las noches pese a la supresión de este turno hace un mes.

Tanto hoy como mañana han sido convocadas sendas concentraciones a las puertas de la terminal en apoyo a los trabajadores cuyos contratos finalizan.

Por otro lado, a las seis y media de la madrugada de ayer personas desconocidas colocaron una barricada en el kilómetro 4,2 de la AS-19, a la altura de Casa Gerardo, prendiéndole fuego a neumáticos. Se trata de una acción que está vinculada al conflicto laboral en la terminal de minerales de El Musel, según diversas fuentes. La barricada apenas causó incidencia en el tráfico y debido a la magnitud de la misma pudo ser retirada por una dotación de la Guardia Civil, si necesidad de la intervención de bomberos para sofocar las llamas.