La Policía Nacional investiga una brutal paliza que se saldó el viernes por la noche con un pescador vasco herido de gravedad a manos, presuntamente, de varios agresores. Era casi medianoche, y según los pocos testigos de lo sucedido, así como otro marinero que acompañaba al agredido, “dos o tres hombres” se abalanzaron contra las víctimas, provocando que uno de ellos cayese fuertemente contra el suelo. Sanitarios de la UVI-Móvil lo trasladaron rápidamente al Hospital de Cabueñes, donde se comprobó que sufría un traumatismo severo y una fractura craneal, por lo que se decidió su traslado inmediato al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Los agresores se dieron a la fuga y, al menos hasta ayer, a la Policía Nacional no le constaba ningún arresto, aunque se espera que las grabaciones de seguridad de la calle ayuden a saldar pronto el caso. No han trascendido los motivos de la agresión.
Los hechos ocurrieron poco después de las 23.30 horas del pasado viernes. Según explicó el pescador que no resultó herido de gravedad, tanto él como su compañero estaban en la ciudad de paso, convocados por la campaña de bocarte, y que se vieron envueltos en una trifulca con otras dos o tres personas. Trató, dijo, de defenderse de los golpes, y cuando se quiso dar cuenta su compañero ya estaba tendido en el suelo, inconsciente o muy aturdido, en un charco de sangre, como consecuencia de haber recibió un fuerte golpe en la cabeza. Los autores de la paliza, por su parte, y siempre según la versión de este afectado, salieron huyendo antes de la llegada de los sanitarios.
El personal de la UVI-Móvil trasladó a la víctima, que responde a las iniciales A. Z. L. y que tiene unos 40 años de edad, al Hospital Universitario de Cabueñes. En el centro sanitario, fue sometido de urgencia a varias pruebas diagnósticas que ratificaron que la herida en la cabeza respondía a un traumatismo craneoencefálico con hemorragia grave y fractura craneal, por lo que fue derivado al HUCA en estado grave, aunque entre hoy y mañana se espera que ya pueda recibir el alta.
La Policía Nacional se encargará de continuar con las pesquisas. Confía en que, debido a lo céntrico del lugar del suceso, alguna cámara de seguridad haya podido recoger la huida de los presuntos responsables. La desventaja para los investigadores será que por las horas a las que ocurrió el incidente, ya sobrepasado el toque de queda, no habrá gran cantidad de testigos. Será fundamental el testimonio del compañero de la víctima.
