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La avenida del Jardín Botánico, a 50 kilómetros por hora si lo pide Emtusa

El Ayuntamiento se plantea recurrir a las excepciones de la DGT para que los autobuses no pierdan velocidad en sus servicios

Tráfico en la avenida del Jardín Botánico. | Juan Plaza

El Ayuntamiento de Gijón está abierto a aprovechar las excepciones que permite la norma de la Dirección General de Tráfico para levantar el tope de los 30 kilómetros/hora que se acaba de imponer sobre la gran mayoría de las vías urbanas. La posibilidad de ampliar la velocidad a 50 kilómetros se reduciría a vías muy concretas y siempre que lo pidiera la Empresa Municipal de Transportes Urbanos (Emtusa).

El cambio se debate ahora sobre la avenida del Jardín Botánico. Un eje básico para Emtusa ya que por ella pasan algunas de sus líneas de mayor uso de viajeros con destino al hospital de Cabueñes. La reducción de velocidad en esa vía podría llevar a los autobuses municipales a una demora en los tiempos del trayecto, que impactaría de manera negativa en el servicio que se da a los ciudadanos. Desde Emtusa se está analizando el impacto de la bajada a 30 km/hora en esa vía y en alguna otra.

Así se indicó ayer en la comisión de Movilidad a preguntas del edil forista Pelayo Barcia, que pidió al equipo de gobierno que “aclare las numerosas dudas de los gijoneses sobre la limitación de la velocidad a 30 y la implantación de radares”. No hay que olvidar que más allá de la obligatoriedad de la reducción de la velocidad que se impone desde la DGT, ese mismo planteamiento se fija en la recién aprobada ordenanza de movilidad de la ciudad. Una normativa cuya aplicación solo está pendiente de su publicación en el Boletín Oficial del Principado de Asturias, prevista para los próximos días.

La ordenanza se aprobó gracias a los votos a favor de PSOE e IU, como socios del equipo de gobierno, y de Podemos-Equo y Ciudadanos, desde la bancada de la oposición. El mayor rechazo contra la incoativa dentro de la Casa Consistorial lo lidera Foro a través del concejal Pelayo Barcia, como responsable del tema.

Foro comenzará esta semana con su campaña en la calle para publicitar su versión de las prohibiciones y limitaciones que impone la ordenanza a los conductores. Y ya anunció su intención de llevar la norma a los tribunales con el asesoramiento del mismo equipo jurídico que tumbó en 2018 las restricciones de tráfico de Madrid Central.

Precisamente ayer se conocía que Tribunal Supremo había rechazo el recurso de casación que presentó Ecologistas en Acción contra la sentencia que anulaba Madrid Central dando por buenos los argumentos del contencioso que inició el Grupo Municipal Popular en 2018. Uno de los básicos era la falta de una memoria de impacto económico.

Barcia entiende que lo sucedido con Madrid Central abre el camino para que salga adelante el pleito contra la ordenanza de Gijón teniendo en cuenta, explica, “que la normativa de Gijón está basada en la de Madrid, que la ausencia de una memoria económica rigurosa y creíble es uno de nuestros argumentos y que tenemos el mismo equipo de abogados”.

El Muro también su tiempo de protagonismo en la sesión de ayer de la comisión de Movilidad y Medio Ambiente. Desde el equipo de gobierno se volvió a reiterar el rechazo a que se instalen terrazas hosteleras en el nuevo espacio peatonal del paseo del Muro, lo que popularmente se conoce como “el cascayu”. Desde el área de Movilidad no se ponen peros a que sí se puedan ubicar en la prolongación de ese paseo que conforman las calles Caridad y Ruiz Gómez siempre que se autorice desde Urbanismo.

Y para finales de junio se espera ahora la presentación por parte del Colegio de Arquitectos del estudio con las propuestas de futuro para el Muro de San Lorenzo. Un trabajo dentro de la comisión especial sobre el Muro del Consejo Social de Gijón.

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