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jaime priede | Director de contenidos de la Feria del Libro de Gijón

“Queremos mantener la doble ubicación en Begoña y Tomás y Valiente en el futuro”

“Editoriales como Alfaguara y Planeta ven que la feria puede ser la tercera en importancia a nivel nacional, solo por detrás de Madrid y Barcelona”

Jaime Priede, en la calle Tomás y Valiente. Ángel González

Jaime Priede es el director de contenidos de la Feria del Libro de Gijón, que ayer cerró sus puertas. Una edición de la que hace un balance muy positivo.

–Durante varios días de la Feria llovió a chuzos.

–El tiempo no ha acompañado, pero Gijón sí ha acompañado al tiempo, en el sentido de que la ciudad se ha volcado. Los actos tenían prácticamente todos el aforo completo.

–¿Seguirá aumentando el número de expositores?

–Este año ha habido 52, 12 más que en 2020 y por primera vez han venido editoriales de fuera de Asturias. Hay poco margen de crecimiento porque la ubicación de la feria es intocable, porque estamos en el mejor sitio posible, en el centro.

–¿Prevé mantener la doble ubicación de Begoña y Tomás y Valiente tras la pandemia?

–La idea es mantenerla. En todo caso hay que consultar a los libreros, a ver cómo lo ven.

–Dice que los aforos se les quedaron pequeños.

–Sí. Se nota que la gente echa de menos lo presencial y los autores también están encantados por el contacto directo con el público. Pero venimos de una situación muy complicada, y lo primero es la seguridad.

–¿Qué perspectivas tiene para futuras ediciones?

–Queremos seguir manteniendo una red de colaboración con otras entidades, consolidar la colaboración que hemos iniciado este año con el Festival Internacional de Cine, mantenerla con el Museo Evaristo Valle y la Fundación Alvargonzález, y también con la Cátedra Leonard Cohen. También tenemos como objetivo para el próximo año mantener el nivel de actos culturales que hemos logrado este año. Lo que nos preocupa es traer buenos libros y autores interesantes.

–Apunta que es difícil que la feria crezca en expositores. ¿Y en proyección?

–Pasaron por aquí la directora general de Alfaguara y la directora general de comunicación de Planeta. Es una buena señal que se hayan acercado hasta Gijón para ver como era esta feria. Es la primera vez que vienen, acompañando a sus autores y para saber en qué consistía ese run run sobre la feria de Gijón que escuchaban. Hemos hablado de proyectos para próximas ediciones, pero aún a nivel muy general, como por ejemplo poder traer más premios importantes. También queremos mantener el equilibrio de los grandes grupos editoriales con editoriales independientes y con los autores locales. Una feria del libro tiene que apoyar a los autores y a las editoriales locales, pero tiene que estar al servicio de la ciudadanía, generando una diversidad que vaya más allá de lo local.

–¿Qué le han dicho las directivas de Alfaguara y Planeta?

–Me comentaban que en estos momentos, con lo que habían visto, la feria de Gijón apuntaba a que podía ser la tercera en importancia a nivel nacional, tras las de Madrid y Barcelona. Son procesos que no son rápidos, pero llevamos dos ediciones con esta nueva etapa de gestión y este año hemos dado un salto muy importante y se empieza a hablar de la feria fuera y se nota a la hora de organizar un programa. Este año nos resultó mucho más sencillo que el pasado convencer a autores importantes para que vinieran. La gente empieza a querer estar en Gijón. Nosotros tenemos también como objetivo que las presentaciones de libros sean actos culturales, diálogos entre escritores y un escritor o un periodista cultural local, que sea capaz de mantener al mismo nivel una conversación con ese autor. Y esa fórmula está calando entre los editores y entre los autores.

–¿Cómo han ido las ventas este año?

–Por lo que comentan los libreros, a pesar de la lluvia, con los que he hablado están encantados. Sobre todo el fin de semana, con una gran afluencia de gente no sólo echando un vistazo, si no comprando. La pandemia ha generado un fenómeno de interés por la lectura que no se ha visto como algo propio de la pandemia, si no que se ha mantenido.

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