“Quiero felicitar en este día a la comunidad marítima asturiana, a todos los que tienen al mar como forma de vida”. Así empezó ayer su discurso Luis Vicente Márquez Montero, nuevo comandante naval de Gijón, en la iglesia de San Pedro, durante la tradicional misa en honor a la Virgen del Carmen, patrona de la Armada española. Minutos antes, había recibido a las puertas del templo a las numerosas autoridades civiles, militares y feligreses que no se quisieron perder la eucaristía, que estuvo oficiada por el párroco, Javier Gómez Cuesta.
“Quiero dedicarle a nuestro nuevo comandante los mejores deseos para que pueda cumplir con su misión”, indicó el sacerdote durante la eucaristía, en la que elogió la labor de la Armada, “una institución imprescindible”. También se acordó de todos aquellos que están de servicio estos días lejos de sus familias. “Son un ejemplo de la entrega por lo demás y es de justicia que así se lo reconozcamos”, indicó Gómez Cuesta.
Tras la comunión, el párroco cedió la palabra al comandante Márquez, que, tras agradecer la asistencia a los presentes, dedicó unas palabras al recibimiento que le ha dado la ciudad. “Me he sentido apoyado desde que he llegado”, indicó el madrileño, que hasta ahora estaba destinado en la base militar de Rota, en la provincia de Cádiz. El militar lamentó que la persistente pandemia empañase la típica celebración en honor a la patrona en el Club de Regatas. Pero añadió que, como marino, sabe que la mar inculca superar adversidades. “Nos enseña y nos aporta fe y esperanza, pero necesitamos una guía, una estrella, y esa es nuestra virgen”, señaló, para finalizar deseando que la Virgen ampare a los presentes y sus familias.
La ceremonia, a la que acudieron el director de Agricultura y Pesca del Principado, Enrique Rodríguez Nuño; la diputada nacional del PP Paloma Gázquez; el portavoz municipal de este partido, Alberto López-Asenjo; el presidente de la Autoridad Portuaria, Laureano Lourido; y Francisco González, director general de Pesca Marítima, se cerró con la “Salve Marinera”.
