El Ayuntamiento de Gijón empezó ayer la sustitución de los hasta ahora habituales pulsadores mecánicos de los semáforos por un nuevo sistema que hará innecesario el contacto con la estructura y se activará al pasar cerca la mano. Los ubicados en el paso de peatones del paseo Doctor Fleming, frente a la entrada principal del recinto ferial Luis Adaro, han sido los primeros en quedarse sin botones. Y no serán los únicos, puesto que está previsto la progresiva implantación de este método en 72 semáforos repartidos por la ciudad.

Esta medida, que viene recogida en el contrato de mantenimiento, conservación y reparación del Sistema Centralizado de Control de Tráfico del Servicio de Movilidad, llega en un momento en el que se da mucha importancia a evitar tocar objetos y superficies debido a los riesgos del covid-19. Muchas personas sienten cierto reparo en utilizar mecanismos como los pulsadores mecánicos y esto puede ser considerado un problema, porque por evitar un posible contacto y posterior problema de salud, deciden ignorar las normas de tráfico y arriesgarse a cruzar sin accionar el botón, con el semáforo aún en rojo. Por prevenir mejor que curar, el Ayuntamiento ha decidido empezar a cambiar el sistema, que además considera anticuado.

Los sistemas de activación sin contacto están fabricados de aluminio y su funcionamiento viene a través de un sensor de infrarrojos, que captura el movimiento del peatón, de modo que no hace falta apretar el pulsador, sino que con un simple movimiento cerca del dispositivo, el semáforo identificará la intención de la persona y su deseo de cruzar. Un aparato moderno y fácil de usar, que necesitará poca explicación a aquellos que no estén familiarizados con él, pues posiblemente ya se hayan cruzado con él en otra forma, como en grifos o expendedores de gel. Se ha asegurado también que el tiempo del que los viandantes dispondrán para transitar el paso será más que suficiente, garantizando así su seguridad frente a posibles accidentes o confusiones.

Otra medida que planea instalar de forma gradual el Servicio de Movilidad son avisadores acústicos con descontadores de tiempo en 60 semáforos que aún no cuentan con ellos. Estos se sumarán a los 1.636 que ya están en pleno funcionamiento en Gijón, y que ayudan a aquellas personas invidentes o con movilidad reducida a saber cuando pueden atravesar la carretera con seguridad y cuando es mejor esperar al próximo turno. La tecnología avanza y, con ella, la vida diaria de la ciudadanía, que ve cómo van llegando nuevos cambios ligados a la tecnología.