Dos jóvenes resultaron ayer detenidos a manos de la Policía Nacional acusados de haber arrollado con su vehículo a cuatro personas en Tremañes. Los hechos se produjeron tras una trifulca en la que participaron todos los implicados en la madrugada del miércoles al jueves frente a un bar de la zona. Tras el atropello, las cuatro víctimas fueron derivadas a Jove, aunque ya han sido dadas de alta y el mayor herido un hombre de unos 50 años que se ha roto un brazo.

Según explicaron los afectados a la Policía Nacional, la trifulca involucró primero a estos dos agresores, ambos veinteañeros, y a dos de las víctimas, un padre y su hijo. El grupo se conocía previamente e iniciaron una acalorada discusión que fue subiendo de tono.

La trifulca acabó a golpes, y fue entonces cuando salieron del establecimiento otras dos personas que trataron de mediar en la pelea en defensa del padre y el hijo, así como dos mujeres que acompañaban a los agresores y que también trataron de calmar los ánimos en el grupo.

Se creyó que lo habían logrado, porque en un primer momento los dos jóvenes que acabarían detenidos abandonaron la escena. Sin embargo, regresaron a los pocos minutos, ya al volante del coche, y presuntamente embistieron tanto al padre y a su hijo como a los otros dos varones que habían salido en su defensa. Todos presentaban heridas visibles tras lo sucedido.

Después se dieron a la fuga, pero las víctimas los conocían y su detención pudo oficializarse ayer por la mañana. Según cuentan los vecinos, la presunta agresión se produjo a la salida de un establecimiento hostelero en las inmediaciones del Camino de la Iglesia.