La comisión municipal de Hacienda dio ayer el visto bueno a una inyección económica extraordinaria a la empresa municipal de autobuses (Emtusa) de casi 3,4 millones de euros para hacer frente a la reducción de ingresos provocada por la pérdida de viajeros a causa de la pandemia. Se trata de la segunda aportación de este tipo que hace efectiva el Ayuntamiento para asegurar la viabilidad del transporte urbano frente al coronavirus. La primera, para paliar el impacto sobre las cuentas de Emtusa en 2020, sumó 3,4 millones de euros, sufragados con la partida de 5 millones concedida al Consistorio por el gobierno central. Los 1,6 millones de euros restantes se destinan a la ayuda de este ejercicio, con lo que el Ayuntamiento pondrá de su remanente los algo más de 1,6 millones que restan hasta cubrir los casi 3,4 millones autorizados.

En una complicada situación económica, Emtusa estrena esta mañana su primera línea exprés, un modelo de servicio con menos paradas y más rápido, con el que espera recuperar parte del pasaje perdido desde el inicio de la pandemia.

En la misma comisión también se dio luz verde al informe trimestral sobre el periodo medio de pago a proveedores. Fue de 28,25 días, dentro de los márgenes que autoriza la legislación vigente.

El portavoz de Foro, Jesús Martínez Salvador, advirtió tras la comisión de que el Ayuntamiento de Gijón “deja de ingresar aproximadamente 200.000 euros al año que recibía por la deducción del IVA del Botánico cuando este equipamiento pertenecía a Divertia”.