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Los tres acusados por el asalto de Sidra Menéndez, absueltos por falta de pruebas

La magistrada afirma que hay “sospechas”, pero “no indicios suficientes” de la autoría del robo violento de joyas y dinero a la familia de lagareros

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Material incautado por la Guardia Civil a la banda de asalta viviendas, que tenían joyas de la familia Menéndez. G. C.

Los tres acusados de nacionalidad rumana acusados de perpetrar el asalto al lagar de Sidra Menéndez, en Fano, en agosto de 2018, han salido absueltos del proceso judicial en el que se vieron inmersos –y en el que el Ministerio Fiscal solicitaba siete años de cárcel para cada uno de ellos– al entender la magistrada que, “si bien existen sospechas a la vista de los atestados” de la Guardia Civil, “y se pueden establecer conjeturas acerca de la posible intervención de los procesados en los hechos”, no existen “indicios suficientes” que acrediten su implicación y, por tanto, no hay pruebas suficientes para enervar la presunción de inocencia. Los tres negaron los cargos. La sentencia, comunicada ayer a las partes, no es firme y cabe recurso ante la Audiencia Provincial, pero dado que la familia de lagareros optó por no ejercer la acusación particular, solo la Fiscalía podría presentar recurso.

La sentencia, emitida por el Juzgado de lo Penal número 3 de Gijón, da por buen el relato del calvario vivido por la familia de Sidra Menéndez, que en la noche del 17 de agosto de 2018 cuatro personas encapuchadas, con guantes, y portando cuchillos y una barra de hierro accedieron a la vivienda por una ventana con la intención de robar. A una de las residentes, que estaba en el salón con su madre, le colocaron una navaja en el cuello, advirtiéndole que no le pasaría nada si permanecía en silencio. Luego, subieron a la parte superior, y accedieron a la habitación en la que dormía el marido de la primera, al que golpearon mientras le exigían que les diese todo el dinero que tuviera en la casa.

Los delincuentes rebuscaron por todas las habitaciones, logrando un botín de 8.500 euros en efectivo además de otras joyas, un reloj y sortijas. Antes de irse, ataron de pies y manos a los tres moradores con unas sábanas y cinta. Al hombre le amenazaron con pegarle un tiro si se movía. Se fueron con tiempo suficiente para huir hasta que la mujer pudo desatarse y pedir ayuda.

La forma de actuar de estos hombres se vio poco después en otras viviendas de la zona rural de Gijón y Villaviciosa. La Guardia Civil, alertada de su presencia en la región, logró detener tras un asalto a varios miembros de la banda. Todas las pesquisas para atrapar a este grupo criminal especializado en el asalto a casas habitadas se derivaron luego a Albacete, donde se originó la investigación contra ellos. Fueron estos agentes quienes motivaron en marzo de 2019 la caída de la banda a la que se le atribuían robos con violencia en diez provincias, sumando 62 delitos, incluidos los cometidos en Fano y Villaviciosa. En los registros practicados aparecieron joyas de las robadas en Sidra Menéndez, así que las indagaciones posteriores llevaron a sentar en el banquillo a estos tres detenidos (uno de ellos representado por el abogado Luis Tuero en esta causa) en aquella operación.

Las pruebas aportadas al caso no se han traducido en sentencia condenatoria. Los propios agentes, destaca la jueza en su sentencia, reconocieron que no hallaron ni huellas ni vestigios en la vivienda que se les pudiese atribuir a ellos. El violento asalto de Sidra Menéndez está sin culpables.

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