Los dos jóvenes que permanecían encarcelados por un supuesto delito de agresión sexual a dos mujeres en una pensión del barrio del Carmen, a finales del pasado mes de julio, han quedado en libertad tras abonar ayer una fianza de 5.000 euros para cada uno. Los investigados, que hoy saldrán del Centro Penitenciario de Asturias y regresarán junto a su familia en Braga (Portugal), deberán cumplir una orden de alejamiento que les impide aproximarse a menos de 300 metros de las denunciantes y se les han retirado sus respectivos pasaportes.
La defensa de estos individuos, ejercida por el abogado gijonés Germán Inclán, solicitó hace unas semanas su puesta en libertad, una petición a la que no se opuso el Ministerio Fiscal, siempre y cuando se incluyesen una serie de medidas preventivas. En base a esos argumentos, la Audiencia dictó ayer el auto de puesta en libertad provisional, fijando esas medidas solicitadas por la Fiscalía. A pesar de que la familia de los jóvenes realizó por transferencia el pago de las fianzas impuestas, no pudieron llegar a tiempo hasta la cárcel, ubicada en Villabona, lo que motivó que ambos investigados pasasen esta última noche entre rejas. Los dos chicos siguen vinculados a la causa, igual que sus otros dos amigos que estaban presentes la madrugada en la que se denunciaron los hechos y que quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración en el Palacio de Justicia.
“Otra irregularidad más”
La decisión judicial llega tras la insistencia de la defensa, que recurrió a la Audiencia cuando la jueza de instrucción les mantuvo en prisión provisional. No obstante, el abogado critica “la excesiva” cuantía de la fianza para dos jóvenes “mileuristas”. “Es el sueldo de cinco meses de trabajo; han tenido que ayudar sus padres”, estima Germán Inclán.
Además, el letrado advierte “otra irregularidad más” en el procedimiento. “La ley dice claramente que cuando se discuta en apelación la situación personal de los procesados, si la defensa pide vista, el tribunal la fijará. En este caso en la apelación se discutía la libertad, por tanto, cabe dentro de la ley para poder discutir y argumentar la petición, pero la sala falló sin fijar la vista”, reprocha Inclán. En esa vista solicitada su objetivo era el de solicitar el pago de una fianza acorde a los ingresos de sus representados.
La investigación judicial sigue adelante, ahora con todos los investigados en libertad provisional, para esclarecer este caso que generó distintas movilizaciones en la ciudad.
