El carril bus previsto para la avenida de la Constitución, en dirección al centro de la ciudad, estará implantado antes de final de año, según informó ayer el concejal de movilidad, Aurelio Martín, en respuesta a preguntas del PP en la Comisión de Seguridad, Movilidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Gijón. Este nuevo carril se sumará al que se inauguró hace unos meses en La Calzada, en las calles Gran Capitán y Brasil. En cuanto a otro de los proyectos para reservar un carril para el transporte público de viajeros, en la Avenida de Pablo Iglesias, está aún más verde, dado que su implantación no tendría lugar hasta 2022, y estaría pendiente de la captación de fondos europeos, según las explicaciones dadas en la comisión.
La implantación de más carriles bus en Gijón, así como la toma de decisiones sobre las lineas, quedará pendiente de la asistencia técnica que va a licitar Emtusa de manera inminente para estudiar sus tráficos, viajeros, líneas y paradas, asistencia de la que se analizará la conexión de Nuevo Roces. El concejal y presidente de Emtusa, José Luis Fernández, indicó por su parte en la Comisión, a preguntas de Foro Asturias, que la contratación por diez años del nuevo servicio de bicicletas municipales le saldrá a Emtusa por unos ocho millones de euros más IVA, explicando posteriormente en Consejo de Administración de la empresa municipal que se estima una aportación municipal a Emtusa de entre 400.000 y 420.000 euros anuales para sostener este servicio, que será deficitario.
En el consejo de Emtusa también se informó de que la empresa está registrado actualmente el doble de absentismo que habituales, con cifras de más del 12%; que el nivel viajeros de este mes es aún un 75% al previo a la pandemia y que la nueva linea E-71, que une directamente el oeste de la ciudad con el Hospital de Cabueñes transporta 500 viajeros al día, una cifra baja que se debe a la reciente implantación de este trayecto exprés.
Volviendo a la reunión de la Comisión de Movilidad, el concejal de medio ambiente anunció que el Ayuntamiento va a encargar una encuesta antes de implantar las zonas de bajas emisiones –la primera está prevista en La Calzada– en respuesta a la pregunta de Ciudadanos sobre si se iba a consultar a los vecinos respecto a ese plan municipal.
El gobierno local ratificó en la misma su decisión de que comiencen a aplicarse las restricciones de aparcamiento en la zona azul de los vehículos sin etiqueta ambiental a partir del próximo año nuevo. El PP preguntó por sendos temas conexos para los vecinos de la zona rural, como son los aparcamientos disuasorios y habilitar transportes lanzadera para unir las parroquias con el casco urbano, algo esto último que como pronto no estará disponible hasta la próxima primavera y que aún no está claro si el servicio lo gestionará Emtusa o el Consorcio de Transportes de Asturias. En cuanto a los aparcamientos disuasorios, se informó de que probablemente se habilitará uno el año que viene con aportación de fondos del Principado para ejecutar las obras. Estará a las afueras del casco urbano, en un área del concejo aún por concretar. Podemos-Equo, por su parte, urgió a que se apruebe el reglamento de bienestar animal antes de fin de año.
