Integrantes del servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento del Ayuntamiento de Gijón tuvieron que desplazarse ayer hasta la escultura de “La madre del Emigrante” después de que una perra se precipitase a las rocas mientras paseaba con su dueño sobre la tres de la tarde. Uno de los efectivos del parque de bomberos se descolgó con un arnés para llegar hasta el animal, atrapado en las rocas y subirlo en brazos (como refleja la imagen de la derecha) tras realizar un anclaje y poder devolvérselo al paseo para entregárselo a su dueño. Las intervenciones del equipo de bomberos –el pasado año realizar 2.709 actuaciones– incluyen en muchas ocasiones el rescate de animales, encaramados en algún punto elevado o por accidentes similares al ocurrido ayer.