Papa Gore Ndoye ha abandonado ya el Centro Penitenciario de Asturias, donde cumplía prisión preventiva desde el pasado 24 de mayo por agredir a diez policías –heridos de distinta consideración– tras una intervención en el domicilio en el que convive con su pareja sentimental, en el barrio de Montevil. Este individuo, con otra sentencia recurrida en el Tribunal Supremo por atentado a agente de la autoridad, deberá presentarse a firmar en el Palacio de Justicia cada quince días de acuerdo con la petición de la fiscal del caso, que tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA, solicitó medidas “menos gravosas” contra el exmilitar senegalés al entender que el riesgo de reiteración delictiva se había “desdibujado” tras cinco meses entre rejas. No obstante, la alegría por su salida de la cárcel le ha durado poco a Ndoye, que ayer mismo recibió la condena de seis meses de prisión por su trifulca con un marroquí en un bar de Pumarín.

El exmilitar senegalés, que en estos últimos episodios siempre ha defendido que le atacaron, suma una nueva condena a su historial delictivo. En 2016, recibió dos años y medio de prisión por un delito de atentado a agente de la autoridad después de haber agredido a seis policías nacionales en la calle Juan Alvargonzález, que habían intervenido porque este individuo estaba aporreando la puerta de una exnovia. Esa sentencia motivó que se iniciaran los trámites de su expulsión del territorio nacional, algo que se ha ido dilatando tanto por la pandemia como por las causas pendientes con la justicia.

Años más tarde, en agosto de 2019, volvió a atacar a otros cuatro agentes, en la misma calle del barrio de El Llano, lo que le supuso una condena de 16 meses de cárcel. Este fallo, ratificado por la Audiencia Provincial, está recurrido ante el Tribunal Supremo. Pero ese 2019 también volvió a ser detenido, en el mes de noviembre, por un altercado con un ciudadano marroquí en un bar de la calle Cataluña. Es precisamente la sentencia de este caso la que acaba de recibir Ndoye, que le impone otros seis meses de cárcel por un delito de lesiones. El magistrado titular del Juzgado de lo Penal nº 1 de Gijón entiende que tanto él como el otro implicado discutieron en el bar y que, “con ánimo de menoscabar la integridad física el uno respecto del otro, se agredieron mutuamente”.

Sin arraigo en España

La nueva sentencia, que puede ser recurrida ante la Audiencia, le impone al otro implicado, Abdelouahid E. J., natural de Marruecos y en situación irregular en España, tres años y medio de cárcel y otros cinco de alejamiento del exmilitar, al que apuñaló por la espalda con un machete de cocina. Papa Gore Ndoye, que antes le había propinado dos puñetazos a su agresor, logró reducirle a pesar de tener heridas en la espalda que sangraban profusamente. En ambos casos, refleja el fallo, “no consta que los acusados tengan arraigo en España ni ninguna circunstancia excepcional que justifique su permanencia en territorio español”.

Las causas pendientes del exmilitar todavía no han acabado, y sigue en marcha su agresión a diez policías, tanto a los que intervinieron en Montevil como a los que hirió en Comisaría. La novia de Ndoye avala su versión, y hasta ha denunciado por daños y lesiones a los agentes que acudieron a su domicilio. Eso sí, por el momento, el exmilitar seguirá en libertad el avance de este caso, en el que los afectados ejercen la acusación particular.