El área sanitaria de Gijón entregó ayer sus “medallas de oro” a la investigación. Los XXXI Premios de Innovación e Investigación distinguieron, entre otros, un plan de prevención de suicidios y un trabajo sobre el manejo de la pandemia. El primero, en la categoría de Enfermería, redujo “drásticamente” las tentativas en pacientes con trastorno mental grave del Centro de Tratamiento Integral Montevil –dependiente del Hospital de Cabueñes–. El segundo, en la categoría de Medicina, se presentará en una próxima jornada. Emilio Sánchez, al frente del Servicio de Nefrología de Cabueñes, dedicó su galardón a los damnificados por la erupción de La Palma. El evento de entrega de premios se celebró en el salón de actos de Cabueñes justo un día después de que la licitación de la obra de ampliación del hospital quedara desierta, en medio de una intensa polémica.
Presentaron la gala las periodistas Amor Domínguez, de LA NUEVA ESPAÑA, y Laura Fonseca. “Nuestra apuesta por la innovación y la investigación es decidida”, destacó el gerente del área, Manuel Bayona. La directora general de Política y Planificación Sanitaria, Lidia Clara Rodríguez, animó a los profesionales sanitarios a investigar y a comunicar los resultados. “Es un paso estratégico para alcanzar la excelencia en el sistema sanitario público”, destacó. Faustino Blanco, presidente de la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria en Asturias (FINBA), apuntó que Cabueñes “tiene la puerta abierta a la entidad, así debe de ser y así debe de sentirse”. Esta edición, con una comisión investigadora que preside Manuel Vallina, batió récord de trabajos presentados: cuarenta, el doble que en la anterior convocatoria.
Las intervenciones dieron paso a la entrega de galardones. El jefe de servicio de Nefrología no pudo acudir al acto, “por un compromiso previo”. Eso sí, se comprometió a presentar el proyecto “Manejo de pacientes en hemodiálisis con sospecha o confirmación de infección por covid-19” en una próxima jornada. Además de Emilio Sánchez, firmaron el proyecto Manuel Macía y Patricia de Sequera. En esta misma categoría, recibió el accésit la investigación “Células madre mesenquimales en homeostasis y enfermedades sistemáticas: hipótesis, evidencias y oportunidades terapéuticas”, de Francisco J. Vizoso, Noemí Eiro, Luis Costa, Paloma Esparza, Mariana Landín, Patricia Díaz, José Sheneider y Román Pérez Fernández, de la Unidad de Investigación Fundación Hospital de Jove.
Y un interesante proyecto para la categoría de enfermería: “Intentos de suicidio en personas con esquizofrenia antes y después de participar en un programa comunitario intensivo con manejo de casos; un seguimiento de veinte años”. Firmado por Danny Francisco Frías-Ortoza, Silvia Díaz-Fernández y Juan José Fernández-Miranda. Durante la investigación, explicó Díaz-Fernández, siguieron a 344 pacientes; todos los ingresos en Montevil de 2004 a 2008. Retrocedieron en sus historiales una década y los siguieron durante los siguientes diez años. El accésit en esta categoría fue para el proyecto “Efectividad de un programa de enfermería en autocuidados y mindfulness para el abordaje del trastorno mental común en atención primaria”, de Anaí Izaguirre, Lara Menéndez y Fernando Alonso.
Los premios a la excelencia fueron para: “Patrones e prescipción y resultados clínicos de fármacos antirreumáticos” (C. Martínez-Mújica y Gloria Manso) y “Manejo de angiomiolipomas renales esporádicos” (que recogió Sergio Fernández-Pello). La obra “Cuaderno Cultural Prímula” recibió el galardón de Gestión y Servicios no sanitarios. Recogió el premio María Antonia Fernández, en nombre de un amplio equipo. El accésit de esta categoría fue para “¿Inglés en la biblioteca?”, de María Luz Carrelo Magadán, Covadonga de Hoyos Rodríguez e Inés Adelaida.
