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pedro baños | | Coronel en la reserva y experto en geopolítica, dio una charla en la Laboral

Pedro Baños: “El gas va a seguir subiendo y veremos si habrá para todas las calefacciones”

Pedro Baños. Marcos León

Pedro Baños, coronel del Ejército de Tierra en situación de reserva, colaborador habitual en programas de televisión en su condición de analista geopolítico y autor de varios libros, fue ayer uno de los ponentes en la jornada “Fijando el Norte. La encrucijada de las compras en la industria del siglo XXI”, organizada por Nueso Group en Laboral, ante la actual crisis de aprovisionamientos que están sufriendo las empresas.

–¿Tenemos todos los huevos en la misma cesta, en China?

–En Asia, porque también estaríamos hablando de India, de Vietnam, Japón y Corea del Sur además de China. En Europa tenemos una dependencia muy importante de estos países. Eso ha significado una gran vulnerabilidad en estos momentos, donde se juntan muchas circunstancias. Además de todo lo que ha significado la pandemia, el enfrentamiento China-Estados Unidos, el atasco en los puertos y quienes están abusando y encareciendo, como por ejemplo algunas navieras.

–¿Consecuencia?

–Al final somos los ciudadanos los que vamos a pagar los platos rotos con un incremento de los precios más que notable y en algunos casos no vamos ni a tener acceso a algunos productos ni siquiera a precios caros.

–¿Es una circunstancia fortuita, por trabajar las fábricas sin stocks, o hay algo más detrás?

–Hay muchos factores. Uno de ellos es que las fábricas no tienen almacenamiento de stocks ni siquiera para un mes. Todo parecía que llegaba en el momento y no había necesidad de tener esos grandes depósitos porque es caro y además la mercancía se puede desfasar. Ese es uno de los replanteamientos que a lo mejor hay que hacerse y tener almacenamientos al menos para uno o dos meses. Luego hay quien está acaparando materias primas para subir el precio de manera artificial. Pero es cierto que se han juntado muchas circunstancias, a veces, imprevisibles.

–¿Cuánto puede durar?

–Las fechas que nos están dando para salir de esta situación cada vez se van alargando más. Ahora se está hablando de finales de 2023. Veremos a ver qué va a suceder. Eso lo tenemos que enlazar con lo que está sucediendo todavía con la pandemia en buena parte del mundo y muy especialmente en Europa. Desde Francia hasta Rusia la situación empieza a ser dramática, con confinamientos y restricciones a la movilidad y eso va a repercutir una vez más en que se rompan eslabones en la cadena logística.

–¿La crisis energética tiene las mismas raíces que la de suministro?

–Son diferentes, porque ahí tendríamos que meter en la ecuación a Rusia, que es un actor muy importante, ya que junto a EE UU son los principales exportadores de gas y tienen su pelea particular que termina afectándonos a Europa. Lo estamos viendo con el Northstream 2, el gasoducto que viene directamente de Rusia hasta Alemania, donde EE UU ha puesto todas las zancadillas posibles para que no se llegue a materializar y a pesar de estar finalizada la construcción, vemos cómo ha presionado a Alemania que al menos durante otros seis meses no va a permitir que empiece a fluir el gas por esa canalización. Todo eso unido a que el lejano oriente es el consumidor del 75% de todo el gas natural y tienen una capacidad económica importante, incluso superior a la UE, y están acaparando buena parte del gas.

–¿Cómo afecta a España?

–Nos afecta muchísimo. Ahora mismo importamos el 50% gas natural casi todo de Argelia y el 50% gas natural licuado que tiene que venir en buques metaneros que se van al mejor postor sin importarles las penalizaciones que tengan por incumplir un contrato y el mejor postor suelen ser los países asiáticos. Y desde que se ha cortado el gasoducto que llegaba a través de Marruecos, se tiene que compensar con metaneros, que es muy difícil tenerlos disponibles. Una cosa es que estén reservados y otra que finalmente lleguen a nuestro territorio. La situación ahora mismo en España es muy complicada. Lo que está claro es que precio del gas va a seguir aumentando y veremos a ver si todos los ciudadanos son capaces de tener a su disposición gas, ya no digo para producir electricidad, si no para calentarse en sus casas o disponer de agua caliente.

–¿Qué hacer?

–Aprender las lecciones para no volver a caer en los mismos errores, pero me temo que una vez que pase esta circunstancia volveremos a lo mismo. Ahora se habla de relocalización de empresas pero volveremos otra vez a ver deslocalizaciones a países con manos de obra más barata, porque en el mundo occidental somos muy cortoplacistas, buscamos los beneficios inmediatos.

–¿Y cuál es el papel de los servicios de inteligencia?

–Tienen un papel absolutamente clave, lo que pasa es que hoy en día cada vez es más complicado hacer unos análisis que válidos casi a corto plazo. Y muchas veces los análisis que hacen los servicios de inteligencia cuando llegan al ámbito político son despreciados, ignorados o tergiversados, muchas veces por intereses de partido, más allá de intereses de Estado. Hacer inteligencia económica hoy en día es esencial, tanto en el plano estatal como por supuesto para cualquier multinacional o gran empresa.

–¿Y las pymes?

–Siempre se puede hacer una pequeña inteligencia económica, aunque no tengas un departamento específicamente. Y lo que es fundamental es siempre tener una estrategia aunque seas una pequeña empresa. Lo que no podemos hacer es ir aprendiendo a base de errores sistemáticamente.

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