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El 70% de los médicos de atención primaria, exentos de trabajar de tarde por su edad

La falta de personal deja una media diaria de veinte consultas sin cubrir, aseguran los facultativos: “Cada vez hay más compañeros con ansiedad”

Pacientes a las puertas del centro de salud de Puerta de la Villa. | Marcos León

La falta de relevo generacional y la aún en marcha jubilación en masa de la generación “boom” de facultativos licenciados en la década de los 80 han dejado a la atención primaria en Gijón, atravesada por una pandemia que la ha obligado a duplicar los esfuerzos, con una plantilla médica muy envejecida y en uno los momentos más delicados de su historia. Según datos del propio personal, de los 173 puestos de médicos de familia hay 139 que son fijas, con médicos con plaza en propiedad, pero de todos ellos solo 39 realizan obligatoriamente guardias, menos del 30%. Los otros cien están exentos de realizarlas por superar los 55 años y, como la plantilla fija no puede atender toda la demanda, se apoya en personal eventual, sin contrato fijo, pero que en número tampoco llega para cubrir bajas ni vacaciones. “La media de incidencias que no se cubren son de 23 consultas”, asegura el personal, que calcula que se está realizando ahora cerca de 50 consultas cada día por el auge de las patologías de tipo respiratorio y en plena escasez de personal de enfermería, volcado aún en la campaña de vacunación.

El grueso de médicos eventuales del área sanitaria cubre cada vez menos huecos. Hay, desgranó Salud Pública a los propios profesionales en una reciente reunión, 53 contratos activos. Y, de ellos 19 están destinados a la atención continuada –la atención fuera del horario de mañana–, así que solo 34 pueden cubrir las consultas ordinarias. Y, como en total hay 173 puestos y 139 están cubiertas de forma fija, esos 34 eventuales restantes son los justos para cubrirlas. Con estas cifras, el personal sanitario de centros de salud del área sanitaria gijonesa no puede cubrir descansos, vacaciones, ausencias ni bajas. “Incluso cuando se contratan refuerzos ya se ha normalizado la idea de que queden consultas sin cubrir todos los días”, lamentan los profesionales.

El envejecimiento de la plantilla sanitaria complica organizar un sistema ya de por sí complejo. En Gijón, como en el resto de la región, fuera del horario de consultas de la mañana hay dos equipos. El Servicio de Atención Continuada (SAC), que se encarga de cubrir los centros de 15:00 a 20:00 de lunes a viernes y de 8:00 a 20:00 los fines de semana. Y el Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), que trabaja a turnos de 20:00 a 8:00 horas. El SUAP es una plantilla algo más estable y con mejores condiciones laborales, y el SAC lo integran tanto los propios médicos con plaza fija en horario de mañanas como la plantilla de eventuales –sin plaza fija– del área sanitaria. Los médicos con plaza deben hacer al menos tres de estas guardias de SAC al mes, pero al ser cada vez más los que pueden renunciar a ellas por edad o por enfermedad, los eventuales asumen cada vez más carga de trabajo y tanto ellos como los que tienen plaza se ven obligados a estirar sus turnos hasta las 17 horas con cada vez más frecuencia, según aseguran los propios afectados. Y todo esto, en mitad de una sensación de hartazgo por parte de muchos usuarios cansados de llamadas infructuosas a su centro de salud y el cierre de los siete puntos que ya no abren por las tardes.

¿Soluciones? A corto plazo, pocas. SICEPA-USIPA, por ejemplo, plantea sacar de “los despachos del Sespa” a médicos de familia con cargos de gestión. Mantener la atención en horario de tarde en solo cuatro centros también paliaría parte del problema, pero pondría en contra al sector vecinal, y plantear suspender esa exención de guardias a mayores de 55 no sería bien recibido por buena parte de los profesionales. “Cada vez hay más compañeros con ansiedad”, lamentan desde primaria.

Las claves

Guardias. El 70% de la plantilla médica de primaria está exenta de atender a pacientes por las tardes por superar los 55 años o padecer alguna enfermedad.

Consecuencias. Solo 39 médicos del área están obligados a hacer estas guardias junto a una plantilla de eventuales tan ajustada que no cubre descansos.

La pandemia. El problema crece ahora, en plena sexta ola, con más pacientes con covid. Muchos en estado leve acuden al centro creyendo que es un resfriado.

El auge de pacientes respiratorios complican la atención presencial

Con jornadas de hasta 70 consultas, aumentan las citas de enfermos que confunden su covid con un resfriado común

La crisis en atención primaria se topa ahora con una sexta ola pandémica que, aunque ya se empieza a notar también en el nivel de ingresos hospitalarios, está colapsando sobre todo a los centros de salud, encargados del seguimiento de los entre 200 y 300 nuevos contagios que registra Asturias cada día. Con unas 50 consultas diarias por médico, en Gijón ha habido ya jornadas de facultativos que cierran su día con entre 60 y 70 enfermos atendidos.

Como la atención telefónica sigue siendo complicada –el aluvión de llamadas de usuarios y el hecho de que los propios sanitarios realizan también ahora más llamadas por la atención telemática–, son cada vez más los pacientes que se ven superados por la angustia de no poder hablar con su médico y se presentan presencialmente en su centro de referencia, también aquellos con algún síntoma de tipo respiratorio poco grave. “Como por esta época parece más normal coger cualquier cosa la gente ya no sospecha que pueda tener covid, sobre todo si la cosa es leve, pero ahora ya se están detectando positivos a diario”, aclaran desde primaria.

El protocolo de actuación vigente, además, es “inabarcable”, porque técnicamente cualquier sospecha de covid –malestar, fiebre, problemas para respirar– implica solicitar una PCR. Algunos pacientes lo rechazan o creen que es una exageración, y a veces los propios médicos ven excesivo solicitar pruebas diagnósticas de forma masiva. También se mantiene esa falsa creencia de que estar vacunado impide contraer un virus que ya ha provocado, además, nuevas bajas entre la plantilla sanitaria.

Como buena noticia, el área sanitaria ya ha implantado en todos sus centros la nueva historia clínica electrónica, siendo la primera de Asturias en superar el proceso, que se ha extendido ahora a las áreas de Avilés y Cangas del Narcea.

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