El “cascayu” ha perdido su veraniega zona “chill out”. Los bancos y mesas instalados el pasado julio como zona de descanso en el nuevo, y polémico, espacio peatonal del Muro, se han retirado. Una retirada que se hizo efectiva para no interferir en una serie de pruebas deportivas que están teniendo lugar en la zona pero que se mantendrá a lo largo del invierno, como ya se había adelantado desde el Ayuntamiento cuando arrancó la experiencia.

Sí continua, por ahora, un espacio similiar de descanso ubicado en el paseo de Poniente, a la altura de la escalera central de acceso a la playa. Un consolidado espacio peatonal donde mesas, bancos y jardineras no generaron tanto impacto y polémica como en el Muro.

Ambos puntos “chill out” se presentaron como una experiencia piloto para la “humanización” de espacios de tránsito peatonal en el casco urbano y con piezas realizadas por alumnos de una escuela taller.